A solo unas semanas de que comience la temporada navideña, los consumidores ya comienzan a dar muestras de cómo celebrarán las fiestas, al menos en el plano gastronómico. En un año marcado por la pandemia y las restricciones de movilidad serán unas Navidades sin precedentes, con menos reuniones sociales y familiares y más tiempo en casa.
Además, el coronavirus no solo ha tenido impacto en el ámbito social y los hábitos de consumo a nivel internacional, sino que también ha provocado un efecto negativo a todos los niveles económicos. Como consecuencia, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ya ha explicado que este año los precios de los alimentos propios de la época solo han subido un 1,1% y se prevé contención de cara a las próximas semanas.
Las recomendaciones sanitarias pasan por pedir a los ciudadanos que eviten las aglomeraciones, también a la hora de hacer las compras de Navidad, por lo que efectivamente las compras de alimentos se están adelantando a lo habitual. A esto también influye la crisis económica derivada del Covid-19, que ha afectado al bolsillo de los ciudadanos y prefieren aprovechar la oportunidad antes de que los precios se disparen.
Un estudio de la OCU anticipa que los españoles gastarán este año un 20% menos con respecto a años anteriores. La media de gasto por persona supera los 500 euros, a niveles similares que en años anteriores, con regalos, comidas y celebraciones como gastos principales.
¿Qué alimentos suben y cuáles bajan?
La OCU ha elaborado un análisis de la valoración del precio de 15 productos típicos de Navidad, que puede servir de previsiones para lo que ocurrirá en las próximas semanas. El estudio se centra en la compra de alimentos frescos de distintos supermercados, hipermercados, grandes almacenes y mercados de España.
La lista de OCU recoge carnes típicas como jamón ibérico, pularda, ternera, cordero o pavo y pescados y mariscos como ostras, merluza, percebes, almejas, langostinos, besugo, lubina o angulas.
De estos, las angulas lideran el ranking de subidas, un 38% más caras con respecto a 2019; seguidas de la pularda (30%) y el redondo de ternera (12%). En el lado contrario, bajan su precio la lubina, un 21% menos; el jamón ibérico de cebo (-13%) y el besugo. Con respecto a noviembre, las mayores subidas se producen en las carnes típicas.
Sin embargo, el precio del pavo es más barato con respecto a años anteriores, además de los pescados y mariscos. Entre estos, la OCU asegura que las almejas son un 6% más baratas, los percebes un 3%, los langostinos un 11% y el besugo un 12%. En el lado opuesto, suben las angulas, las ostras y la merluza.
Consulte aquí todos los cambios en los precios de los alimentos típicos de Navidad desde 2015:
