La vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, ha mostrado su satisfacción por los datos del paro y afiliación a la Seguridad Social conocidos hoy, que "muestran que en octubre se ha acelerado la creación de empleo", a "los niveles de prepandemia", y "esperamos que sigan acelerándose en el curso de noviembre". En una entrevista en la SER, esta mañana, la ministra de Economía ha aclarado los aspectos principales de la reforma laboral en la que trabaja el Ejecutivo y ha huido del "ruido" alrededor de los desencuentros con la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

"Los datos del mercado de son muy positivos, muestran que en octubre se ha acelerado la creación de empleo. Si tenemos en cuenta la creación número de trabajadores y la reducción de los que están en ERTE, que están en torno a los 190.000 -y esperamos que esto siga acelerándose en el curso de noviembre- ya hemos recuperado los niveles de empleo de prepandemia y es una noticia muy positiva. Le confieso que las noticiasdel empleo son las que más feliz me hacen", ha afirmado Calviño.

Una "derogación" parcial

Preguntada por el término "derogación" incluido en el acuerdo alcanzado en la reunión de Pedro Sánchez y Yolanda Díaz, la ministra de Economía  ha respondido que prefiere "huir de debates que me parecen muy pobres y estériles, porque los ciudadanos se merecen algo más que un conflicto entre eslóganes y construir el mercado laboral que acompañe la modernización que necesita nuestro país". Calviño ha explicado claramente en qué consiste "la hoja de ruta" que sigue el Gobierno en la reforma laboral y en su explicación ha quedado claro que se hará una derogación parcial porque "no se trata de cambiar todo por cambiar, se trata de corregir".

"Hace bastante tiempo que hemos dicho con claridad que todo el Gobierno está absolutamente comprometido con una reforma que nos permita erradicar la precariedad, impulsar la competitivad de las empresas y reequilibrar la negociación colectiva. Esa es la hoja de ruta con la que estamos trabajando, todo lo demás es ruido, un conflicto de esloganes que no es lo que interesa a los ciudadanos", ha subrayado la ministra, que ha desgrado en proyecto en el que se trabaja.

La temporalidad y los salarios de pobres

"El mercado laboral arrastra un problema de temporalidad, estamos muy por encima de las medias europeas, tenemos qaue convertir el contrato indefinido en el contrato normal, limitando las causas que pueden producir el contrato temporal", ha empezado diciendo, antes de pasar "al segundo problema" que enfrenta el mecado laboral: la competitividad, la bajada de salarios, los trabajadores pobres. Para superarlo, Calviño ha abogado porque sean los convenios sectoriales los que fijen los salarios

El paro estructural

La ministra de Economía también ha indicado que el proyecto en el que trabaja el Gobierno pone en la mirilla "el paro estructural. Cuando hay una crisis se destruye empleo", y ha defendido la utilidad de los ERTES como mecanismo de protección de los trabajadores. Pero también en darle "flexibilidad a las empresas". Se trata de "corregir los aspectos que han deteriado los problemas o no los han resuelto. Son problemas de hace mucho tiempo. No hay que retroarse al 2009, porque había una enorme precariedad y una burbuja", ha advertido.

Una reforma consensuada con los empresarios

Nadia Calviño la subrayado la importancia de que se impliquen los agentes sociales, en particular los empresarios porque "las reformas estructurales que de verdad son eficaces en el tiempo son las que cuentan con el máximo consenso", y ha recordado que la reforma de 2012 fue hecha de manera unilateral. "Nuestro objetivo debe ser que la patronal se sume. tenemos que ver dónde ponemos el cursor para que eso ocurra", ha señalado.