La Comisión Europea ha dado un paso más este miércoles en el diseño del marco común para establecer las condiciones de un salario mínimo en la Unión Europea, una herramienta contemplada desde hace meses y "esencial" para la recuperación económica tras el impacto del pandemia del coronavirus

La medida es una de las iniciativas estrella de Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, que lo ha propuesto desde su llegada al Ejecutivo a finales de 2019. Sin embargo, no pretende establecer un salario mínimo europeo propiamente dicho, sino acordar ciertas condiciones básicas para que sean los países finalmente quienes fijen su salario mínimo propio si así lo consideran. 

La Comisión ha lanzado una segunda consulta a los agentes sociales hasta el 4 de septiembre después de comprobar en la primera, entre enero y febrero, que son necesarias medidas adicionales, según las respuestas de más de una veintena de organizaciones sindicales y patronales.

Ahora, el Ejecutivo europeo reconoce que la pandemia del coronavirus "ha provocado que reclamen mayores esfuerzos a la UE para reducir las desigualdades salariales y la pobreza de las personas ocupadas".

"Uno de cada seis trabajadores tiene un salario bajo y la mayoría de ellos son mujeres"

"Uno de cada seis trabajadores tiene un salario bajo y la mayoría de ellos son mujeres. Estos trabajadores mantuvieron vivas nuestras sociedades y economías cuando todo lo demás tuvo que detenerse, pero paradójicamente serán los más afectados por la crisis. Esta iniciativa es un elemento esencial de nuestra estrategia de recuperación", ha expresado el comisario de Empleo, Nicolas Schmit.

En esta segunda consulta, Bruselas establece "posibles vías" para garantizar que los salarios mínimos europeos se fijen en niveles adecuados y protejan a todos los trabajadores. La iniciativa tendrá como objetivo garantizar que la negociación colectiva funciona de forma correcta a la hora de fijar los salarios.

Además, la Comisión Europea establece que los interlocutores sociales deben participar en la fijación de los salarios mínimos, los marcos nacionales deben seguir "criterios claros y estables" para la actualización periódica de los mismos y deben eliminarse o limitarse las exenciones, con los correspondientes mecanismos de control.

Los agentes sociales que participen en esta segunda consulta tendrán que explicar qué tipo de instrumento prefieren para llevar a cabo la iniciativa, es decir, una directiva con carácter legislativo o una simple recomendación sin peso jurídico.