En su último informe de ‘Situación España’, presentado este miércoles por Jorge Sicilia, director de BBVA Research y economista jefe del Grupo BBVA, Rafael Doménech, responsable de Análisis Económico, y Miguel Cardoso, economista jefe de BBVA Research, la filial de estudios de BBVA ha mantenido el escenario previsto hace tres meses.

Así, el crecimiento del PIB nacional podría ralentizarse hasta el 1,6% este año, desde el 1,9% con el que cerró 2019. Para el próximo 2021, la mejora del entorno internacional provocaría una moderada aceleración y el crecimiento podría alcanzar niveles cercanos al 1,9%, gracias al mejor comportamiento del consumo privado, de la inversión y de las exportaciones.

Si se cumplen las previsiones, BBVA adelanta que se crearían alrededor de 600.000 puestos de trabajo durante el bienio 2020-21, con la tasa de paro aproximadamente en el 12,5% en 2021. Por su parte, gran parte de los componentes de la demanda doméstica crecerán a menor ritmo que en los últimos años aunque seguirán siendo una parte importante del avance del PIB.

En el último trimestre se confirmaron las previsiones de BBVA Research y el crecimiento anual del PIB se habría desacelerado hasta el 1,9%, 0,5 puntos porcentuales menos que el año anterior. Sin embargo, el informe destaca un ligero aumento, tanto del consumo privado como del público y ,de hecho, el aumento del consumo compensó el retroceso de la inversión.

"La evolución del empleo está siendo peor de lo previsto"

Según los analistas, “la evolución del empleo está siendo peor de lo previsto”. A pesar de que el incremento de la renta ha acelerado el consumo de las familias, la economía española no ha experimentado una aceleración del ahorro por parte de las familias.

El informe cita el ejemplo concreto de Cataluña, que durante el mes de octubre ha sufrido un impacto negativo en su economía por las jornadas de huelga y tensión. No obstante, aseguran que el impacto ha sido más limitado que hace dos años.

Con respecto a la demanda externa, tras el estancamiento entre julio y septiembre del año pasado, las exportaciones de bienes y servicios mejoraron en el cuarto trimestre del año, un 2,7% en términos interanuales. De igual forma, las importaciones también habrían aumentado en el cuarto trimestre del año, un 3,7% en tasa interanual. En resumen, la demanda externa neta afectó positivamente al crecimiento de la economía española.

En el lado negativo, algunos sectores continúan reflejando la puesta en marca de los nuevos cambios regulatorios, por ejemplo, las compras de automóviles y el sector inmobiliario. Este último perjudicado por la controversia provocada por el pago del impuesto de actos jurídicos documentados, los cambios en la regulación del alquiler y la Ley de Crédito Inmobiliario.

Andalucía, Murcia y Canarias fueron las más perjudicadas por la subida del SMI

También se han visto afectadas aquellas empresas o colectivos más expuestos al aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), aunque la repercusión es limitada. Jorge Sicilia ha reconocido que el impacto negativo del SMI sobre la creación de empleo está cumpliendo con lo previsto, así como que los efectos se van a seguir notando. Por el momento, el analista se ha negado a valorar la subida anunciada ayer por Pedro Sánchez ya que aún no se ha puesto en marcha.

En cuanto a los afectados por esta subida, los analistas han destacado comunidades como Andalucía, Murcia y Canarias como las más perjudicadas, así como el sector de la hostelería. En relación a esto, el turismo de playa sigue mostrando una debilidad más allá de la ralentización de la demanda externa aunque el contagio hacia otros sectores permanece acotado, según el informe de BBVA.

A nivel internacional, la incertidumbre externa ha disminuido gracias a una mayor claridad en los temas comerciales, según el informe. Tanto la menor probabilidad de un Brexit duro, como la reducción en la tensión entre la guerra comercial de Estados Unidos y China han contribuido a limitar las incertidumbres, así como una estabilización en los datos de comercio global y de producción industrial y de una mejora en los mercados financieros.

Por otro lado, también se ha consolidado la expectativa de una política fiscal moderadamente más expansiva en la Unión Europea, especialmente en Alemania. Aunque no es suficiente para aumentar las expectativas de inflación de la Eurozona, esto permitirá al Banco Central Europeo mantener los tipos de interés, sin tener que tomar medidas adicionales.

En el lado negativo, el actual conflicto entre Estados Unidos e Irán y sus consecuencias sobre el precio del petróleo podría tener consecuencias negativas para la economía española, con una alta dependencia energética.

Relacionado El conflicto entre Estados Unidos e Irán dispara el precio de los carburantes

La velocidad de recuperación de la economía depende del Gobierno

De cara al futuro económico de España, el equipo de BBVA Research asegura que la velocidad de recuperación dependerá de las políticas del nuevo Gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos. Por su parte, aseguran que la incertidumbre sobre la política económica se mantiene elevada dada la falta de consenso que parece mantenerse sobre temas clave.

El informe recomienda revisar las distintas evaluaciones sobre los efectos de las medidas anteriores y mantener aspectos valorados positivamente antes de introducir cambios en ámbitos como el mercado laboral o la revalorización de las pensiones. En esta línea, BBVA Research también recomienda al Gobierno centrarse en reducir el desequilibrio de las cuentas públicas, minimizando el impacto de la consolidación fiscal sobre el crecimiento.

Así, el nuevo Gobierno tiene por delante varios retos económicos como la bajada del desempleo y el uso de contratos temporales, asegurar la sostenibilidad del sistema de pensiones debido al envejecimiento de la población y al estancamiento de la productividad. Estos factores apuntan, según el informe, a que a medio plazo la economía española pueda crecer a un ritmo menor que el de los últimos años si no se adoptan las reformas necesarias.

Los analistas de BBVA Research recuerdan en esta línea que es necesario adoptar políticas económicas que incrementen el crecimiento potencial, mediante un entorno favorable para la inversión, la innovación y el empleo con el que afrontar la transformación digital y la transición energética, y reducir el déficit público, el desempleo y la desigualdad.

Preguntado por el impacto que las medidas del nuevo Gobierno podrían tener en la economía española, Jorge Sicilia ha asegurado que “se conocen los intérpretes pero el concierto no ha empezado todavía”. En otras palabras, el analista ha adelantado que valorarán el impacto en el momento en que se vayan tomando medidas.