Telefónica quiere que en 2020 el 30% de los puestos directivos estén ocupados por mujeres, un objetivo que ya se ha cumplido en algunos de los departamentos. En este momento la presencia de mujeres en el máximo órgano ejecutivo es de un 17,6%, un punto porcentual más que en el año anterior. Avanzar en materia de igualdad es uno de los compromisos que figuran en el Informe Integrado de la compañía correspondiente a 2017 que han presentado en Madrid la directora general de Finanzas y Control de Telefónica, Laura Abasolo, y la directora de Ética Corporativa y Sostenibilidad, Elena Valderrábano. Es una de las cinco telcos del mundo incluidas en el Índeice Bloomberg de Igauldad de género. La compañía apuesta por un "modelo de liderazgo inclusivo", según definió Laura Abasolo.

El Informe integra parámetros financieros y no financieros que permiten dar una idea más global sobre la evolución de la actividad de Telefónica y su impacto social, económico y ambiental en todos los países en los que opera. La diversidad es uno de los grandes ejes estratégicos de la compañía. En 2017 se nombró un "Chief Diversity Officer" para fomentar la cultura de la equidad, pluralidad e inclusión, potenciar la gestión del talento y garantizar la diversidad como palanca de crecimiento.

Telefónica cuenta con un total de 122.718 empleados de 91 nacionalidades distintas repartidos en los 24 países en los que opera. El 97,9% son contratos laborales indefinidos y genera un millón de empleos entre directos, indirectos e inducidos. Una de sus principales apuestas, además de la igualdad es la incoporación de talento y rejuvenecer la plantilla. En este momento, el 71% de los nuevos empleados en Telefónica España son menores de 34 años. En los últimos dos años se han incorporado 15.000 jóvenes a la plantilla y otros 25.000 lo harán en los próximos tres años.

De los trabajadores de Telefónica, el 32% lo hace en países de América Latina, el 28,5% en Brasil, un 26% en España, y el resto se reparten en el resto de países, como Alemania y Reino Unido. La presencia de mujeres ha aumentado hasta representar actualmente el 37,7%.

Impacto en el PIB

“Telefónica es un agente económico y social que impacta de forma positiva en las comunidades donde está presente”, explicó la CFO de Telefónica, Laura Abasolo. “La contribución al PIB en 2017 del conjunto de países en los que opera fue de 52.232 millones de euros, casi un 0,6% del total de riqueza generada en el conjunto de los países más relevantes”. Además, por cada euro que genera, aporta 3,2 euros al PIB de los países en los que está presente. En España supone el 1,4% del PIB. 

La contribución económica y social de Telefónica es cuantificable también en cuanto a su aportación a las haciendas locales.  Por cada 100 euros de cifra de negocio de la compañía, 23,4 euros se destinan al pago de impuestos. De ellos, 6,4 son para el pago de impuestos soportados y 17, al de recaudados. La contribución tributaria total de la compañía en 2017 ha sido de más de 12.000 millones de euros. 

Como muestra del compromiso con los países donde opera, Telefónica adjudicó el año pasado el 83% de sus compras a proveedores locales, especialmente las áreas de infraestructura de red, sistemas de información o terminales. Todos ellos están obligados a desarrollar su actividad aplicando estándares éticos similares a los Principios de Negocio Responsable de Telefónica, cumpliendo con los derechos humanos y laborales fundamentales y la protección del medio ambiente. 

Compromiso con el medio ambiente

Asimismo está comprometida con la consecución de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas, con especial atención al Objetivo 9, el referido a Industria, Innovación e Infraestructura. Ya se han adelantado en el objetivo de eficiencia energética, con 52% MWh/tráfico respecto a 2015. El 46,8% de la electricidad proviene de fuentes renovables, las emisiones se han reducido en un 28% respecto a 2015, mientras que se ha digitalizado la gestión de los residuos en 6 países donde opera.  

Mediante la descarbonización de la actividad de Telefónica, con una apuesta por la disociación entre crecimiento de negocio y emisiones de gases de efecto invernadero, la idea es ayudar a limitar el calentamiento global por debajo de los 2º C. La huella de carbono generado por la compañía proviene de la Red, por el consumo energético que se necesita para proveer los servicios. Con el plan de la compañía, el objetivo es reducir un 30% la emisión de gases de efecto invernadero en 2020 y el 50% en 2030. Además, el compromiso de Telefónica es que el consumo eléctrico será 100% renovable en 2030. 

Además, los servicios digitales ya están contribuyendo a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en otros sectores industriales y ciudades. En 2017 se evitó el 69% de lo emitido - 939 ktCO2- gracias a servicios como la movilidad inteligente, por ejemplo. Es el equivalente a las emisiones producidas por un coche que viajara ida y vuelta de la Tierra al Sol 17 veces. 

Entre las cifras de impacto positivo neto en el medio ambiente a lo largo de 2017, destaca una posición de vanguardia en economía circular: el reciclaje llega al 98% en las baterías, el 97% en residuos y al 99% en papel.