El Gobierno ultima este miércoles el plan de medidas de choque frente al coronavirus anunciado por el presidente Pedro Sánchez y que aprobará el jueves el Consejo de Ministros en una reunión extraordinaria, han informado a Europa Press fuentes del Ejecutivo.

Los cuatro vicepresidentes del Gobierno (Carmen Calvo, Pablo Iglesias, Nadia Calviño y Teresa Ribera), la ministra de Hacienda y portavoz, María Jesús Montero, y el titular de Sanidad, Salvador Illa, se reúnen en la mañana de este miércoles en la sede de la Vicepresidencia primera que dirige Calvo para pulir los últimos flecos de este plan de choque, ha adelantado la Cadena Ser y confirmado a Europa Press fuentes gubernamentales.

En una comparecencia ante los medios de comunicación este martes, Sánchez concretó algunas de las medidas que incluirá ese plan, como facilidades para que los padres y madres trabajadores con menores a cargo reduzcan su jornada laboral si viven en lugares afectados por el cierre de colegios (hasta la fecha la Comunidad de Madrid, La Rioja y las ciudades alavesas de Vitoria y Labastida).

También se actuará, adelantó Sánchez, para "garantizar el suministro y la producción de medicamentos y el acceso al material sanitario y para "proteger el empleo en sectores que sufran caídas temporales de demanda", con procedimientos de flexibilidad laboral para que las empresas puedan hacer frente a estas dificultades sin recurrir a despidos mediante reducciones de jornadas o ajustes temporales.

Al mismo tiempo, el Gobierno estará vigilante para que ninguna empresa tenga la tentación de hacer un "uso inadecuado" de esta crisis en detrimento de los derechos laborales, advirtió el presidente.

Unida a estas medidas, irán otras para apoyar la liquidez de las pymes del sector productivo español, con líneas de crédito y medidas para facilitar su cumplimiento tributario con aplazamientos y moratorias. "No vamos a permitir que tensiones de liquidez temporal se vuelvan problemas de solvencia para nuestras empresas", señaló el martes Sánchez.

También se adoptarán otras decisiones específicas en el ámbito del turismo y el transporte, que están siendo muy sensibles a la crisis del coronavirus, avanzó el presidente, que se mostró abierto a adaptar la política fiscal a la situación actual.