Ana Rosa Quintana ha vivido un momento tenso durante su programa de este jueves, después de hablar junto a su mesa de debate sobre la imputación de la exsecretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, y su marido, Ignacio López del Hierro. Algo que ha obligado a la conductora de El programa de Ana Rosa a hablar sobre el excomisario José Manuel Villarejo, con quién ella se había reunido en alguna ocasión.

La presentadora ha informado de la decisión judicial en el espacio matutino de Telecinco y durante los turnos de palabra la periodista ha ido haciendo algunos comentarios sobre el excomisario.

Tras informar de los hechos, Ana Rosa ha criticado a la Comisión Kitchen en el Congreso de los Diputados por no avisar a Cospedal de que se había suspendido su intervención, fijada para este miércoles a las 15:30 horas, y que fue anulada después de que el juez García Castellón la imputara.

La comunicadora ha defendido que la exsecretaria general del Partido Popular tenía derecho a no responder a las preguntas, tal y como había hecho su marido, Ignacio López del Hierro, cuando intervino en la misma comisión en la mañana de este miércoles.

"El señor Villarejo ha comparecido en la Comisión Kitchen en el Congreso, aunque estuviera imputado 500 veces. Aunque lo importante es que el juez de la Kitchen ha imputado a la ex número dos del PP, María Dolores de Cospedal, y no sabemos qué decisiones tomarán el PP por esta imputación", ha señalado.

Después de que varios de los tertulianos justificaran que la aparición de la exsecretaria general del PP en la agenda de Villarejo aumentaba las sospechas, Ana Rosa ha aprovechado la situación para ironizar sobre las reuniones con el excomisario: "Hablar con Villarejo o comer con Villarejo, hasta ahora... Bueno, no, perdón... voy a rectificar. Ver a Villarejo ya es delito".

Ana Rosa Quintana ha bromeado con las reuniones con el excomisario, a pesar de que ella se reunió junto a su marido, el empresario Juan Muñoz, con Villarejo antes de que este fuera arrestado. El objetivo de la reunión era el de neutralizar al exjuez Francisco Javier Urquía que trabajaba como abogado de un tercero que les debía dinero.

Durante la investigación sobre las presuntas grabaciones, la comunicadora tuvo que informar en su programa de Telecinco sobre todo lo que ocurría en el Caso Villarejo, aunque en algunos momentos se mostró incómoda. Ejemplo de ello fue el día en el que se filtró el audio de la reunión entre Cospedal y el excomisario y del que Ana Rosa no informó en su programa.

Tras la imputación de Cospedal, algunos de los colaboradores han defendido en el programa de este jueves que, a pesar de las reuniones que aparecían en la agenda, también había grabaciones que servían como acusación claro. Un detalle importante que Ana Rosa ha puesto en duda: "¿Quién asegura que las grabaciones no están editadas?".

"En el asunto Villarejo ya van 100 imputados. La mayoría del IBEX y otros tantos. Están imputados tres presidentes muy gordos. Es que con el tema Villarejo ha habido muchas campañas", ha finalizado la presentadora.