Federico Jiménez Losantos vuelve a descalificar al Partido Popular diciendo que “un partido capaz de traicionar a sus electores día sí y día también” no puede ser que vaya de leal. “¡Yo sí soy leal! -decía Soraya Sáenz de Santamaría- y prometió que, en virtud de su acrisolada lealtad, si perdía, estaría desde el minuto uno a sus órdenes”.

Y Losantos se ríe. Se ríe de la lealtad de la que alardea el PP. Por eso dice que “echar a Arriola es, sin duda, la mejor noticia para la derecha en muchos años”. Aunque dice que lo difícil sería acabar con el “arriolismo” o con “esa sumisión perruna a la izquierda a cambio del reparto del pastel”.

Según él, “Casado se ha pasado de prudente al tratar a las momias del rajoyismo” y claro, se ha llevado por delante el plan de Falconetti “sometiendo a Torra a votación y esputo si va a las Cortes”. Supone que los grupos parlamentarios del diálogo “con los golpistas” quemarían mil ejemplares del Contra Catalunya que ahora reedita Arcadi Espada. Y claro, “los catanazis votarían los presupuestos de Pablenin, Falconetti seguiría volando y el PP seguiría camino de la fosa”, dice.

Hay que ser leal a los españoles, no a los figurones de plantilla. (…) No se puede hacer una tortilla sin romper los etc.”, concluye Losantos.