El párrafo inicial de la nota, a la que hemos tenido acceso, presenta una foto espeluznante de IB3, la radiotelevisión autonómica. “El Sindicato de Periodistas de las Islas Baleares –se lee- denuncia la censura flagrante que ejerce la dirección de informativos. La ingerencia política en las noticias en favor del Gobierno en general y a favor del PP en particular. Todo ello, por encima del interés general y del criterio periodístico. La presión de la censura que se ejerce sobre los trabajadores hace que no puedan redactar las noticias como lo harían desde un punto de vista profesional. Se vetan cortes de voz de irrefutable valor periodístico, se prohíbe por ejemplo hablar de sanidad (si el tema es crítico con el gobierno) … se prohíbe abrir informativos con lo que es noticia en esos momentos y lo que es de interés general y está en debate si el asunto ‘puede molestar’. Se prohíbe, en definitiva, que los informativos estén regidos por el carácter PUBLICO que habrían de tener, ya que son medios que pagamos entre todos y que por tanto habrían de primar el interés general y periodístico”.

Miedo entre los trabajadores
Es el arranque de un análisis que no hace sino empeorar a partir de este punto y de cuyos antecedentes ya hemos informado repetidamente en este periódico. Las fuentes del Sindicato con el que hemos hablado en ELPLURAL.COM hablan directamente de “miedo entre los trabajadores”, que además viven una creciente sobrecarga de trabajo, ya que sin que se aumente su plantilla, desde el inicio de esta temporada además de los informativos realizan un programa diario por la mañana y otro por la tarde.

Según se nos ha explicado en fuentes periodísticas baleares, IB3 carece de una redacción de informativos propia. En concreto, los telediarios de la autonómica los realiza CDM, una empresa del grupo Secuoya, productora montada por empresarios y periodistas afines al PP, como Ernesto Sáenz de Buruaga. Este es en realidad el diseño del Gobierno de Rajoy para todas las televisiones autonómicas, que están en proceso de ‘privatización’ del negocio, aunque las concesiones de frecuencia sigan siendo públicas.

Grave en la TV, desesperada en la radio
La situación, según se explica a ELPLURAL.COM, es grave en la televisión y desesperada en la radio. Los dos directores de informativos, Juan Mestre (televisión) y Xavi Morales (radio), reciben continuas presiones políticas. Presiones que, según se nos asegura, lejos de resistirse no hacen sino canalizar hacia sus respectivas redacciones. Su propio nombramiento fue en realidad muy contestado. Aunque se abrió un concurso público para su elección, antes de que el proceso tuviera lugar ya se daba sus nombres como seguros ‘ganadores’ del proceso.

En la nota del Sindicato de Periodistas, como decimos, se ofrecen ejemplos de manipulación. Aquí resumimos algunos, hechos a partir de las denuncias de los redactores. Por ejemplo de radio… “Ordenes directas de abrir todos los boletines con una apertura, sea cual sea. Ejemplo: 30 de enero, abriremos toda la mañana con una reunión del consejero de Turismo, Carlos Delgado y los hoteleros, que va a tener lugar a las 12.30. Antes no teníamos ninguna información previa. 26 de abril: abrieremos los boletines y el informativo de mediodía con “Alvaro Gijón confía que al final del verano comiencen los primeros cambios en la Playa de Palma….”.

Tapar las noticias con la nevada
Un par más de ejemplos de radio: “Viernes 3 de febrero: se prioriza la nevada como tema de apertura. Es el día en el que también se dan a conocer los datos del paro del mes de enero… Sábado 4 de febrero: 14 piezas de nevada en un informativo de 20 minutos. El Congreso del PSOE de Sevilla al final… 29 de febrero. Incendio en el polígono de Castelló, a toda máquina, a portada. Cuando el fuego ya estaba controlado y no afectaba más que a una nave, se seguía abriendo los boletines con esta información. Este día se había producido la manifestación de los estudiantes (en el cuarto bloque informativo, 2500 personas en la calle. Tampoco dimos las manifestaciones de Barcelona)”.

En la televisión tampoco faltan los ejemplos. Estos son algunos de los que ofrece la nota: “Han dado orden de poner el micrófono –en las ruedas de prensa-, pero de no hacer preguntas a los consejeros: “IB3 nada más que pone el micro y espera”; “diversos casos de redactores que han sido cambiado de lugar de trabajo o de funciones (básicamente dejar de hacer política o cambiar de la radio a la tele), porque habían cuestionado la línea editorial; desde la edición se rechazan los temas que pueden comprometer al PP y poner en cuestión su acción de gobierno; En la manifestación de estudiantes del día 27 de abril, solo se emitieron imágenes y algún corte de voz….”

Negación oficial 
La dirección general de IB3 ha hecho pública una nota en la que niega las acusaciones “con su más enérgica repulsa”, y desmiente “cada una de las informaciones” del sindicato de periodistas, pero estos insisten en que que confirman su denuncia.