Ana Rosa Quintana se ha sumado esta semana a la cada vez más larga lista de rostros conocidos que defienden la homeopatía. La presentadora critica a los curanderos que utilizan 'pseudoterapias' para tratar enfermedades graves, pero, sin embargo, considera que las medidas del Gobierno con respecto a la teoría que defiende la memoria del agua, "son excesivas". 

"¿Vamos a meter en el mismo saco a un estafador que dice que va a curar el cáncer o el autismo con lejía de la homeopatía o la acupuntura, que son ciencias milenarias? Yo entiendo que el Ministerio diga que esto no se de en los centros de la Seguridad Social, ahora, denostar. A mi me parece que la acupuntura funciona y que la homeopatía, en muchas ocasiones, también funciona", ha dicho contundente la periodista de Telecinco. 

A juzgar por estas palabras, Ana Rosa Quintana parece ignorar el número de pacientes oncológicos que renuncia a los tratamientos convencionales para tratar su neoplasia con glucosa.  Así lo contaba a este medio Aurora García, integrante de FarmaCiencia, que denunciaba hace meses que "al hospital en el que yo trabajo llegan oncológicos que deciden que la homeopatía va a ser su tratamiento”. García pedía entonces, que el Ministerio y los profesionales sanitarios tomasen "cartas en el asunto". Sin embargo, que lo hagan, no parece convencer a muchos. 

Que este tipo de declaraciones las haga la presentadora de Telecinco es especialmente preocupante, dado el poder de influencia que tiene. No podemos ignorar que su idea la comparten muchos españoles, los cuales, como ella, tienen derecho a creer lo que consideren. Sin embargo, hacer estas manifestaciones en televisión conlleva un importante riesgo. 

La memoria del agua 

La homeopatía surgió en 1796 de la mano de Samuel Hahnemann y su teoría de que “lo similar cura lo similar”, por lo que no es milenaria. Se basa en que "cualquier sustancia tóxica en cantidades infinitesimales puede sanar". Los análisis en laboratorio de este tipo de productos no han encontrado más que agua con azúcar, de ahí la tesis que defiende la memoria del agua.

Esto presenta grandes ventajas, no hay riesgo de intoxicación. Sin embargo el peligro oculto que ha demostrado tener la homeopatía es su uso como alternativa a los tratamientos convencionales en enfermedades graves. 

Sorprende por tanto, la rotundidad con la que la periodista se han pronunciado al respecto. Aunque, tal vez, concediéndole el beneficio de la duda, podemos pensar que la efectividad a la que se refiere Quintana tiene que ver, no con la homeopatía, sino con la fitoterapia, una confusión habitual que responde a la falta de cultura sanitaria existente en España. La fitoterapia se basa en el uso terapéutico de plantas medicinales y, a diferencia de lo que ocurre con la homeopatía, las propiedades de éstas sí están probadas.

Críticas en las redes 

Al igual que le pasó a Carles Francino, cuando defendió este tipo de productos, Ana Rosa Quintana, ha sido duramente criticada en las redes por sus afirmaciones. Hay quien, incluso, ha hecho un llamamiento para que ningún científico colabore en su programa.