Antonio Resines va reapareciendo ante las cámaras después de su salida del hospital tras su dura lucha contra el coronavirus y si el lunes pasado pudimos verle en El hormiguero, a través de una videollamada, también aparecía en Cuatro en Planeta Calleja, gracias a una grabación realizada hace meses y que Jesús Calleja, aprovechando la recuperación del actor, la incluyó en la parrilla.

Resines se fue de aventuras con Jesús Calleja a Costa Rica y en el viaje estuvo acompañado por su mujer, la jefa de producción de cine, Ana Pérez-Lorente. Ambos se conocieron hace más de 30 años, aunque se casaron hace sólo unos meses. En Planeta Calleja, sentados en un bar de Tortuguero, la pareja contó algunos detalles de su vida privada y sorprendió al presentador con alguna exclusiva, como las circunstancias en las que se conocieron.

El acompañante de Resines en el coche

Ana iba en el coche con una amiga y, desde otro vehículo, dos chicos las saludaron. Para sorpresa de Calleja, el otro que acompañaba a Antonio Resines era el periodista y director de los Informativos de la noche en Telecinco, Pedro Piqueras. El actor terminó saliendo con Ana y, por otro lado, el presentador mantuvo una relación con la amiga durante siete años.

"Yo estaba con una amiga en un coche. El del coche de al lado saludó, a mi amiga le sonaba, miré y le dije 'te suena porque es Pedro Piqueras'", contó Ana. "Entonces, él abrió la ventanilla y ya veo a este y digo: ‘ay qué divertido Resines’, porque a mí me divertía mucho. Entonces nos preguntaron donde íbamos. Y yo le dije a mi amiga que dijera que íbamos a Pachá y se vinieron con nosotros. Y de ahí hasta hoy", contó la productora.

Separarse para seguir juntos

Otro de los detalles revelados es que la pareja pidió dormir en habitaciones separadas en el hotel de Costa Rica. Ana explicó, de manera abierta, la razón: "Yo tengo un problema respiratorio, soy asmática y ronco. Él, por su parte, es muy sensible al ruido". El actor, por su parte, reconoció que "yo no lo habría contado".

La productora desvelo también que a lo largo de su relación han vivido malos momentos y que han estado a punto de separarse. "Ha habido dos parones. Uno de mis cabreos duró tres años y otro, seis", confesó Ana, que añadió que fueron estos periodos en los que se alejaron en los que se dieron cuenta de lo mucho que se querían y de que deseaban seguir juntos.