La actuación de los Mossos de’Esquadra es uno de los vértices del debate tras lo sucedido el domingo durante la celebración del referéndum. Las órdenes expresas desde el gobierno central eran de pararlo, aunque ahora se habla de una “pasividad” en sus acciones.

Por este motivo, seis juzgados emprendieron acciones legales contra los Mossos por su inacción durante el 1-O con el fin de investigar si el cuerpo desobedeció la orden del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSCJ) de impedir el voto en los colegios catalanes.

A esto hay que sumarle una posible denuncia de los sindicatos de policías y de guardias civiles contra el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, por su “bochornosa” actuación de este domingo. Unas acusaciones que se vertieron sobre ellos desde casi primera hora de la mañana del domingo. Mientras la Guardia Civil y la Policía Nacional emplearon la fuerza en algunos puntos, los Mossos se limitaron a levantar acta de los centros ocupados sin llegar al desalojo de los ocupantes.

Impera la ley del silencio

Debido a esto, ELPLURAL.COM se ha puesto en contacto con la policía autonómica catalana para conocer su versión sobre los hechos y pedir una valoración sobre todo lo que ocurrió el 1 de octubre. Sin embargo, han asegurado que “no se ha hecho” ni se hará ninguna valoración policial sobre lo acaecido.

El motivo es que desde diferentes departamentos de la Generalitat están elaborando informes sobre las posibles consecuencias y causas de lo ocurrido en las calles catalanas el pasado domingo. Por lo tanto, los Mossos guardan silencio a pesar de las acusaciones que se vierten sobre ellos por su “pasividad” e “inacción”.