La Plataforma por la Dignidad de las Personas Mayores en las Residencias ha vuelvo a ampliar la denuncia del 31 de marzo y ampliada el 25 de mayo sobre las residencias de la Comunidad de Madrid. Dicha denuncia tiene su motivo en los presuntos delitos por omisión de socorro en las residencias y en los incumplimientos de las órdenes ministeriales por parte del Gobierno liderado por Isabel Díaz Ayuso.
Tal como se asegura en un comunicado de PLADIGMARE, "ampliamos la denuncia a 9 nuevas residencias en las que se han producido un número de fallecimientos superior en cantidad o en porcentaje a la media de fallecimientos ocurridos en las residencias de la Comunidad de Madrid". En total, en estas nueve residencias, el número de fallecimientos ha llegado a las 272 personas en el periodo del 8 de marzo a 23 de junio de 2020.
Las residencias en cuestión son Amavir Coslada, Amavir Usera, La Solana de Tielmes, Getafe Alzheimer, Edad de Oro, de El Alamo, Orpea Pinto I y Orpea Pinto II, Orpea Valdemarín y Geriasa de Madrid. La asociación de familiares pide que se investigue "por parte del Ministerio Público si se ha podido producir algún delito de homicidio imprudente, lesiones y omisión del deber de socorro por parte de las residencias y omisión del deber de perseguir determinados delitos y denegación de auxilio por parte de la Administración Autonómica". A ello suman la cuestión de si se dotó a los trabajadores de los EPIs correspondientes y si se discriminó a algún residente por razones de edad para la derivación a hospitales.
En la primera denuncia, las residencias señaladas fueron Usera, Orpea Alcobendas, Orpea Meco, Orpea Carabanchel, Adolfo Suárez, Centro Geriátrico de Hortaleza, Residencia Hontanar del Jarama, Las Camelias de Móstoles, Parque Coimbra de Móstoles, Sanitas la Florida, Caser La Moraleja, Amavir Valdebernardo y Peñuelas. En la ampliación se sumaron las 14 intervenidas por la Comunidad de Madrid y otras 24 cuyas medias de fallecidos superaban la media.
Cabe recordar que fue esta misma asociación la que ha advertido al Gobierno de Ayuso que las altas temperaturas del verano son un grave peligro ante una cuestionada situación de las residencias madrileñas. La asociación ha hecho hincapié en que "como en veranos anteriores, no hay ninguna garantía sobre la existencia de climatización en las residencias, ni instrucciones sobre temperaturas máximas o mínimas en las mismas" y alertan de que "ahora, sin el apoyo ni el control de las visitas de los familiares, existe un serio peligro de deshidratación y desnutrición de los residentes".
