La sede del Orgullo Vallekano LGTBI resultó ser vandalizada el pasado miércoles, mismo día en el que se celebró el mitin de Vox en la Plaza Roja de Vallecas. Los políticos y simpatizantes de la ultraderecha fueron recibidos por una gran masa de manifestantes antifascistas que, tras la provocación de Abascal, la situación terminó con cargas policiales.
El ataque a la sede del Orgullo Vallekano se ha realizado pintando simbología fascista y mensajes homófobos. Desde la cuenta de Twitter, la organización ha denunciado los hechos, enmarcando el ataque dentro de “la consecuencia de los mensajes de odio de la ultraderecha”: “Esta tarde nuestra sede ha sido agredida, con simbología fascista y mensajes homófobos. Consecuencia de los mensajes de odio de la ultraderecha, nada nos va a parar”.
Durante el acto político, Abascal culpabilizó a Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior, de las “agresiones” que habían sufrido, por lo que remataba que debía “pagar” e “ir a la cárcel”. Mientras, Ortega Smith, secretario general de la formación de extrema derecha, atacó e insultó a los manifestantes, asegurando que eran “gentuza” y que “la mayoría” de los que estaban allí “ni estudian ni trabajan ni se les espera”, ya que, a su criterio, “solo viven de las subvenciones”.
