Crece la indignación entre la plantilla del Ayuntamiento de Padrón por el espectacular aumento de sueldo que el regidor y seis concejales aprobaron en el Pleno de Organización del Consistorio. Un incremento del 18 por ciento de las retribuciones del alcalde, una dedicación exclusiva y cinco parciales del ejecutivo municipal, lo que implica la configuración del equipo de gobierno más caro de la historia del ayuntamiento.

Así, confirmaron que en 2015 el equipo de gobierno gastaba un máximo de 75.000 euros, pero esta cantidad se ha incrementado en la actualidad hasta los 14.3277 euros. El diferencial de 68.277 euros supone, aproximadamente lo que cuesta pagarle la antigüedad a todo el personal laboral, de una plantilla en la que más del 70 por ciento no llega a los 1.000 euros mensuales.

De esta forma el alcalde del Partido Popular, Antonio Fernández, se embolsará  3.139 euros al mes, lo que supone 43.947 euros anuales. Mientras que los ediles cobrarán entre los 40.060 y los 43.336 euros al año.

Tanto el Comité de Empresa como los sindicatos (CIG y CCOO), denunciaron que desde que Antonio Fernández llegó al poder en el año 2015, el 70% del personal laboral del ayuntamiento no superaba el 1,5 % del Salario Mínimo Interprofesional establecido en aquel momento; del mismo modo que no percibían el cobro de los trienios, ni tenían derecho a la Acción Social recogida en el convenio colectivo, y que se presupone destinada a las rentas más bajas. En la actualidad esta situación se perpetúa y afecta a todos los grupos de cotización indistintamente, lo que conlleva que el 70 por ciento de los trabajadores que cobraban en el 2015 poco más de 800 euros netos al mes, en el 2019 han pasado a cobrar poco más de 900 euros, gracias a la subida del SMI establecida por Ley.

La falta de negociación por parte del Ayuntamiento durante los últimos años llevó a los representantes de los trabajadores a interponer una denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social (ITSS) de A Coruña contra el Consistorio, por su pasividad ante las reiteradas peticiones de convocatoria de la Mesa General de Negociación para tratar las deterioradas relaciones entre la institución y su personal. Como consecuencia hubo un requerimiento por parte de Inspección al Consistorio para “someter a negociación las medidas precisas para extender al personal laboral el sistema retributivo de los funcionarios, con criterios de equiparación progresiva y no discriminación”, tal y como establece la clausula transitoria primera del convenio colectivo.

Para terminar el Comité de Empresa ha considerado “humillante, inaceptable y desproporcionado” para el personal laboral, que la primera decisión del alcalde y sus concejales sea subirse el sueldo en 500 euros al mes, cuando hace dos meses no quisieron destinar los casi 69.000 euros anuales que percibirá el regidor, a los trabajadores porque “no había dinero y faltaba un informe favorable”.