Desde el pasado 20 de diciembre la Puerta del Sol de Madrid es un escenario más junto a Hawking o el Mundo del Revés, dos de las sitios principales en las que se desarrolla Stranger Things, la famosa serie que llega a su fin el próximo 1 de enero, cuando se estrena el capítulo final.

Todas las noches, desde hace once días, Netflix viene proyectando un anuncio de ocho minutos con imágenes que hacen alusión a los distintos personajes de la obra de ficción, después de hacer lo propio entre el 4 y el 8 del mismo mes. En total, se trata de 42 pases del videomapping promocional que se alternan sobre la fachada de la Puerta del Sol con otros anuncios de temática puramente navideña.

A ello se suman las paradas de Metro de la emblemática plaza con el anuncio de la serie y que en otros puntos de Gran Vía también se sucede la publicidad de la serie. Además, a la habitual decoración navideña que baja desde la plaza de Callao le siguen elementos asimismo de Stranger Things, como las letras del abecedario que se iluminan cuando hay apariciones extrañas en el desarrollo de la serie.

Beneficio casi nulo

El tema no ha quedado exento de polémica, ya que Netflix no abona ninguna tasa ni a la Comunidad de Madrid, liderada por Isabel Díaz Ayuso, ni al Ayuntamiento, capitaneado por su homólogo a nivel municipal, José Luis Martínez-Almeida. Y los beneficios tampoco son demasiado boyantes si se compara con los que deja para las arcas de Cibeles: 1.528 euros que abona la plataforma audiovisual al Consistorio; es decir, unos 33 euros por día para la parte que se mantendrá hasta el próximo 6 de enero, Día de Reyes.

No es la primera vez que la región pone una alfombra roja a Netflix, y es que hace cosa de medio año, ésta celebró su décimo aniversario en nuestro país cortando durante un día completo la calle Alcalá para acoger en uno de los puntos más concurridos de la capital una fiesta a la que solo se podía acceder si disponías de entrada.

Estos hechos, han despertado el malestar en parte de la sociedad madrileña, así como de la oposición a Ayuso en la Asamblea. Prueba de ello es la reacción que este mismo 31 de diciembre, último día del año, ha tenido la portavoz de la cámara Autonómica en redes sociales, donde ha publicado el siguiente mensaje, acompañado de dos fotos, uno con la proyección de las imágenes sobre el edificio que sostiene el reloj más famoso de España y otra con el cartel que se sitúa encima del mismo, en el que se puede leer Feliz 2026 con las serigrafía de la serie.

“Ayuso no le ha cobrado NADA a Netflix por convertir la puerta del sol en un decorado de Stranger Things. Nos están robando Madrid para convertirlo en un plató de cartón piedra”, ha criticado Bergerot en X, antiguo Twitter.

A estos homenajes a la serie cuyo final se ha desarrollado en diciembre, hay que sumar otros como la entrada de la ballena de Sol, donde también aparece más publicidad. Asimismo, en el centro de la ciudad aparece también una escultura del Demogorgon y el madroño, cambiando la versión original del oso y el madroño madrileños por los antagonistas de la producción estadounidense.

El coste de las campañas no ha sido comunicado ni por la empresa ni por la Comunidad de Madrid.

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