En plena ola de incendios que se encuentra sacudiendo a distintas regiones de España, se ha evidenciado que el fuego no espera y la gestión política, a veces, llega tarde. Este nuevo episodio tiene como protagonista a Carlos Mazón, quien tomó la controvertida decisión de enviar efectivos valencianos para colaborar en la extinción de incendios fuera de la Comunitat. El anuncio se hizo con fuerza, presentado como un gesto de solidaridad hacia los territorios afectados por el avance del fuego. Sin embargo, la situación dio un giro inesperado apenas unas horas después, cuando los bomberos valencianos tuvieron que ser llamados de vuelta de forma repentina, mientras los montes de Castellón comenzaban ya a arder.
Esta decisión ha generado una gran ola de críticas desde la oposición, encabezada por la portavoz de Justicia del PSPV-PSOE en Les Corts, Alicia Andújar, calificando dicha situación como un "ridículo político".
La diputada socialista ha denunciado la "improvisación y frivolidad" de Carlos Mazón en la gestión de los incendios forestales, “evidenciando la precariedad y falta de medios de la Generalitat Valenciana para hacer frente a sus propias emergencias”.
“El lunes anunciaba a bombo y platillo el envío de bomberos para colaborar en la extinción de los incendios de Castilla y León, y ayer tuvo que recular y hacer volver a parte del dispositivo enviado por los incendios que se declararon en la Comunitat Valenciana”, ha señalado Andújar. “Pero lo más grave es que por la tarde tuvo que solicitar la colaboración de unidades de Cataluña y Aragón para atender adecuadamente diversos fuegos en Castellón”.
Para la diputada, este episodio forma parte de una estrategia más amplia del PP: “la bochornosa actuación de Mazón en su intento de utilizar políticamente los incendios forestales siguiendo a pies juntillas la estrategia del PP de atacar al Gobierno de España por todo”.
Además, Andújar ha subrayado que este tipo de improvisaciones no solo pone en riesgo a la ciudadanía afectada por los incendios, sino que también expone a los propios bomberos, que se enfrentan a las consecuencias ante la “falta de personal”, comprometiendo su seguridad.
Falta de personal que pone en riesgo a los bomberos
Las cifras que han salido a la luz son verdaderamente alarmantes. Según datos difundidos en medios, el 70% de las unidades de bomberos de la Generalitat están incompletas y operan con menos personal del que exige el protocolo. “Esto pone en riesgo la seguridad de los bomberos en caso de producirse un siniestro, porque mientras unos están apagando el fuego, otros deben controlar su evolución, y limita muchísimo la eficacia de la lucha contra estos siniestros”, recalca.
“Esta precariedad de medios es la consecuencia de recortar presupuesto en Emergencias, de la improvisación y falta de proyecto para abordar los terribles efectos del cambio climático que estamos viviendo”, concluye Andújar, asegurando que la incompetencia del PP pone en riesgo la vida de las personas.
