Los médicos madrileños han salido este martes a la calle para protestar por los contratos temporales de la Comunidad de Madrid. Esa situación y la no convocatoria de oposiciones, que parece estancada, han sido las perchas principales de las protestas que los sanitarios han llevado a cabo en sus gritos, pancartas, y hasta batas. “Médico facultativo, 16 años con contrato temporal”, se ha podido leer en algunos uniformes. Igualmente, “30 años temporal. Esto sí que es ilegal" o “Ahora, Madrid, tienes que aplaudir”, han subrayado algunas de las proclamas que han lanzado los cientos de manifestantes.
Sin embargo, apuntan la inmensa mayoría de ellos a un abandono que, aseguran, puede extrapolarse a otros ámbitos laborales. “La Sanidad se va deteriorando poco a poco. No se ha ido cumpliendo en el caso del empleo. Las OPEs (Oferta de Empleo) que han tenido que ir sacando poco a poco llevan años sin salir. Con lo cual la estabilidad es baja; y ahora quieren sacar una oposición que puede desestabilizar a los grupos de trabajo existentes. Cuesta mucho especializarse en determinados campos de la medicina como para tener que volver a empezar otra vez de cero”, explica Mario Rodríguez, microbiólogo clínico de hospital Ramón y Cajal.
La marcha ha partido desde el estadio del Rayo Vallecano y ha recorrido las calles del barrio madrileño, histórico en reivindicaciones sociales, hasta finalizar en la Asamblea de Madrid, donde se han sumado algunos políticos como la portavoz de Más Madrid, Mónica García, o las de Unidas Podemos, Alejandra Jacinto y Carolina Alonso.
Así las cosas, durante algo más de una hora los diferentes especialistas que se han desplazado hacia el lugar han explicado de primera mano lo que les ha motivado a una huelga que, por otro lado, aseguran, nadie quiere. “Hay una gran contradicción entre cómo están planteadas ahora las oposiciones desde la CAM y lo que dice la directiva europea de hace años, y lo que dice la Ley Iceta. Esta última dice que las plazas que están ocupadas por personal interino desde antes de 2016 deberían salir en forma de un concurso de méritos. En cambio, la Comunidad hace una oposición clásica con un examen que es eliminatorio. Eso perjudica a gente que lleva trabajando con contratos temporales un montón de años”, explica una de las manifestantes; a la vez que califica como “insuficiente” el acuerdo in extremis que buscaba la Consejería hace cosa de una semana para evitar la huelga.
“Juegan con una baza muy importante. Al final nosotros nos debemos a nuestros pacientes. Yo por ejemplo soy de los pocos especialistas de mano infantil que hay en España y llevo quince años enlazando contratos, sin ninguna capacidad para consolidar mi situación, sin derecho a carrera profesional y sin derecho a nada”, cuenta otro. “Pero llega un momento que dices ‘hasta aquí. No podemos más", asume mientras lamenta que no sabe cuánto durará la huelga, aunque expresa su deseo claro de que sea lo menos posible.
En la misma línea se pronuncia Aitor, del 12 de Octubre, quien afea que parece que “esto es una situación como de venta”. “Ahora 600 plazas, ahora 1.000… Es como si fuese una cuestión de cuánto vales o cuánto cuesta comprarte”, lamenta. “Y no va de eso, ni muchísimo menos, va de que las plazas que tengan que salir que salgan. Esto no es una tómbola. No es un sorteo”.
Apoyo incondicional de la ciudadanía
A lo ancho y largo de la calle Payaso Fofó y Avenida de la Albufera se ha visto a decenas de vecinos aplaudir. En las calles, las terrazas de los bares y la acera misma; e incluso dentro de la manifestación. “Hay que apoyar a la sanidad pública, y que esta señora se entere de una vez”, dicen dos mujeres pancarta en mano. “Es hora de que los sanitarios se movilicen. Que reivindiquen con todo lo que han sufrido”, destaca otro que se muestra totalmente en contra del “abandono” por parte de la Comunidad hacia el sector. “Está muy equivocada. No ve la realidad”, argumenta refiriéndose a la máxima responsable madrileña. “Es de las mejores sanidades que tenemos y estamos cada vez peor. Que se entere la gente de lo que está ocurriendo, pero hay que reivindicarlo”, concluye.
Opiniones, desde luego, para todos los gustos; y evidencias también. Una de estas es, por ejemplo, que el sistema hay que cuidarlo porque “es lo más importante” que tenemos. “Parece que se nos ha olvidado todo el esfuerzo que han hecho durante la pandemia. Hace falta más inversión y más medios”, sostiene un vecino; al que complementa otra: “Los médicos no se merecen los contratos y la precariedad que tienen”.
Reivindicaciones de los sanitarios
La huelga (de 24 horas y a tiempo completo) busca acabar con una temporalidad que el SERMAS cifra en un 52-53%, cuando la ley estipula que debería encontrarse por debajo del 8%. Asimismo, actualmente están en marcha 81 procesos selectivos por concurso oposición para cubrir 28.142 plazas en más de 69 categorías. Sus convocatorias se encuentran en diferentes fases de ejecución y la Comunidad asegura que se agilizarán al máximo después del impacto de la pandemia. Igualmente, y respecto a los facultativos, a día de hoy hay convocadas 47 especialidades médicas que supondrán la adquisición de la condición de personal fijo de 4.725 profesionales.
A ello hay que sumarle las condiciones que marcaba hace una semana el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, para los contratos de este tipo; insuficiente para Médicos y FEA No Fijos de Madrid-MUD, SomosUrgencias SomosUNO y AMYTS. La medida contemplada por el equipo popular se traducía en que en un plazo de dos años el 82% de los más de 17.000 facultativos de la región sean fijos, el 10% interinos y el 7% eventuales. Además, el equipo de Ayuso ha planteado que los servicios mínimos alcancen el 100% de la plantilla -50% para las consultas externas-. Precisamente al final de la marcha y frente a la Cámara Baja madrileña han enseñado la lista (kilométrica) de las personas que no han podido acudir a esta por encontrarse haciendo turnos.
