Jornada especialmente tensa en la Asamblea de Madrid, como si algún día pudiera superar al anterior, con una Isabel Díaz Ayuso completamente desatada después de que la oposición haya fundamentado sus críticas de este jueves en el “negocio” en que la presidenta ha convertido la sanidad. Un tema, el sanitario, del que la presidenta se ha servido también para responder a la izquierda apelando a la huelga sanitaria que empezó el otro día con cuatro de duración.
Después de Vox, ha sido la portavoz del PSOE de Madrid (PSOE-M) en el Parlamento madrileño, la que ha aludido al aumento de las listas de espera “intencionadamente”, a los “paritorios sin salas de urgencia” y otros escándalos de Ribera Salud: “Ya no hay pacientes, sino clientes (…) Lo suyo es una estrategia para asaltar lo público que no es casual. Ahoga a la sanidad públicamente presupuestariamente mientras usted y la panda de golfos que le rodean viven como dios”.
Tras una escueta respuesta por parte de la administradora de la Puerta del Sol en la que la dirigente ‘popular’ ha sostenido que “el modelo sanitario funciona”, Espinar ha preguntado a Ayuso a qué se refería “cuando dijo que dará una respuesta sin paliativos a quien utilice la sanidad de Madrid para hacer negocio”. “¿Estaba hablando de su dimisión en diferido o tomando de nuevo por tontos a todos los madrileños?”.
A la vez que ha recordado las actuaciones fraudulentas de su hermano Tomás y de su novio, Alberto González Amador, la responsable socialista ha evidenciado que a la presidenta de Madrid “le importa una higa lo que pasa” a los pacientes. “Las víctimas no quieren escribir libros, sino reparación y justicia para que la realidad no se repita (…) Debe decir a sus altos cargos que no huyan cuando se los reclama; las cosas son fundamentales conocerlas para que no se repitan”, ha añadido en relación con los conocidos como protocolos de la vergüenza y el juicio de la última semana.
“¿Qué va a hacer con los pacientes que no son rentables? ¿Los va a mandar a otro lado como hace con las mujeres madrileñas o va a decir que se morían igual?”, ha repreguntado Espinar, que ha querido poner punto y final a su intervención con una mención al que fuera cantante de Extremoduro, Robe Iniesta, fallecido el pasado miércoles. “Como diría el gran Robe Iniesta y grábase esta frase: ‘Anda y dígale a su diosecito que aquí huele a mierda”.
"Machistas y misóginos"
En su turno de réplica, la baronesa ha criticado lo que a su juicio es una hipocresía de los progresistas porque éstos “tienen contratada la sanidad público-privada” y ha respondido con otra canción: “A ustedes lo que les pasa se llama obsesión con Ayuso y corrupción con Sánchez (…) Han pasado por la cárcel el dos, el tres, el responsable de SEPI, la fontanera del PSOE… Viendo su gusto, ¿a quién van a poner al frente, a Rocco Siffredi?”, ha ironizado hablando del director de cine para adultos.
Elevando cada vez más al tono, la presidenta de la Comunidad de Madrid ha llegado a decir que Espinar “no salió de las urnas”, sino que “le pusieron a dedo los señoros de Moncloa que acosaban a sus compañeras, se subían la bragueta en su cara y les pedía verles los escotes”. “Que les prohíben a usted en rueda de prensa (…) Le dirigen los señoros machistas de la Moncloa”.
Ayuso asegura que la portavoz socialista “no ha dicho una sola palabra” del acoso sexual del bautizado como ‘caso Salazar’ mientras a ella la preguntan cosas de González Amador (obviando que no es por el hecho de ser su pareja, sino porque los delitos que se investigan): “Son profundamente machistas. ¿Cómo puede ser tan dócil como mujer ante los episodios de acoso sexual en Moncloa? ¿Cuánto va a tragar usted con un puesto que le debe a ese entorno tan machista, viviendo del feminismo de pancarta y haciendo negocio con las mujeres?”
Por su parte, la portavoz de Más Madrid, Manuela Bergerot, ha seguido por la senda de sanidad asumiendo que, tal y como la entiende el PP, el problema lo tiene la formación conservadora. “(…) Buscan el mínimo coste y el máximo lucro. Las residencias están igual que durante la pandemia, hacinamiento, precariedad y comida podrida”, ha dibujado, preguntando también por el ideólogo de los protocolos de la vergüenza. “¿Qué la ha dicho para no tener que declarar? El PP no quiere que declare porque el primer nombre que va a decir es el de Isabel Díaz Ayuso”, ha proyectado.
La lideresa autonómica ha contestado de forma similar a Espinar, repitiendo los mantras de que la madrileña es la “mejor sanidad del mundo”, defendiendo la sanidad privada y criticando el “machismo” y la “misoginia” del Gobierno de España.