La 'número dos' de la candidatura del PSOE a la Asamblea de Madrid y secretaria de Justicia del PSOE, Llanos Castellanos, ha asegurado que es un "asco" todo lo que se conoce del caso 'Mediador'. "Es un asco. Es más, se te cae la cara de vergüenza cuando ves que es una trama de comilonas, de prostitutas, de puteros. En fin, es algo bastante cutre", comentaba en una entrevista que verá la luz en vísperas del 8-M en ElPlural.com.

"El PSOE en 16 horas decidió que esta persona entregara el acta, se tramitó la baja inmediata en el partido y se puso a investigar", destaca sobre la rapidez en la que se actuó. "En otros partidos políticos al que denunció sería al que hubiera sido fusilado políticamente y se hubiera intentado echar una cortina de humo", señala la 'número dos' de Lobato.

"Esto es el caso de un diputado socialista que tenía una red con un mediador, donde había unas comisiones, donde podía haber unas cenas. Pero está saliendo al mismo tiempo que conocemos el alcance de la connivencia entre cargos del Ministerio del Interior que habían organizado la operación 'Kitchen' con jueces", desliza la socialista en la mencionada entrevista.

"Me gustaría recordar, porque como se nos acumulan todos los casos y con los nombres ya no sabemos lo que es nada, que el caso Gürtel eran las mordidas y las comisiones de una trama de financiación de un partido político tal y como está acreditado en sede judicial y que la 'Kitchen' era el montaje policial para intentar tapar la 'Gürtel'", señala sobre las informaciones publicadas por la Cadena Ser este jueves por la mañana en las que el número 2 de interior se mensajeaba con el presidente de la Audiencia Nacional. "Era la utilización de los medios del Ministerio del Interior, de funcionarios públicos para tapar y conseguir la libretita de Bárcenas. Esta mañana nos hemos despertado con la noticia de que el segundo de Jorge Fernández Díaz, el secretario de Estado de Seguridad, se tiró un año cruzándose whatsapps con el presidente de la Audiencia Nacional. Le decía 'tranquilo', 'me entero', 'te cuento'. Y cenaba en su casa. Me resulta inaudito, absolutamente inaudito", recuerda Castellanos.

"Eso sí que es preocupante, porque eso sí que carcome los cimientos de las instituciones y la confianza ciudadana. Lo que se está poniendo de manifiesto del caso 'Kitchen' es que había una policía patriótica, pero es que ahora parece que había también una justicia patriótica. Es alarmante porque lo que tenemos que hacer es dar confianza a la gente. Hay otros que se van cruzando whatsapps durante más de un año y cenan en casa del presidente de la Audiencia Nacional", concluye.

Nuevos detalles de la Kitchen

El citado medio ha publicado unos mensajes de WhatsApp cuyo veto ha sido levantado por el juzgado central de instrucción número 6 de la Audiencia Nacional entre el exsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, a quien la Fiscalía Anticorrupción pide 15 años de cárcel por malversación, encubrimiento y delitos contra la intimidad por el espionaje al extesorero del PP, Luis Bárcenas, en el marco la operación 'Kitchen'.

Así, se rescatan una cadena de mensajes entre el 14 de febrero de 2019 y el 23 de enero de 2020 con el presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro, el mismo órgano jurisdiccional que le acabó imputando. Martínez tantea sobre la posición de la Fiscalía, la actitud del juez del caso, su futuro judicial y la posibilidad de que termine imputado. Además, reclama un auto judicial secreto para preparar su defensa o tener el contenido de la declaración reservada de un comisario involucrado en la causa.

El presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro, nunca se niega a dar los datos al número dos de Fernández Díaz que le contesta con frases como “ya te cuento en cuanto sepa”, “me entero y te digo, “mañana te digo en cuanto salga de las oposiciones” y le transmite “tranquilidad” una vez ya habían anunciado su imputación, en enero de 2020. También dejan entrever que tienen cenas pendientes hablando de un "Vega Sicilia".

El Congreso también se blinda ante 'Mediador'

Las consecuencias del Caso Mediador ya han llegado, también, al edificio del Congreso. Mientras el grupo parlamentario socialista defiende con contundencia y reiteradamente la celeridad con la que han desterrado tanto del partido como de su asiento de la Cámara Baja a Juan Bernardo Fuentes Curbelo, conocido como Tito Berni, las instalaciones han endurecido sus controles para obstaculizar que se haga un uso corrupto de la institución, como todo parece apuntar ha ocurrido en este escándalo. Los diputados, que ya tenían que comunicar sus visitas, tendrán ahora que someterse a un procedimiento mucho más exhaustivo para registrar a todas aquellas personas que entren como sus invitados.

Se trata de una medida de prevención, en tanto en cuanto se demuestra el uso enviciado de las instituciones democráticas, y que se suma a las posiciones de las distintas formaciones. El principal partido afectado, véase el PSOE, reitera su apuesta por la transparencia al tiempo que insiste en la necesidad de regular los lobbies con el objetivo de dificultar las influencias de los grupos de presión en las agrupaciones políticas y departamentos del Gobierno. Por su parte, el Partido Popular descarta la prioridad de esta propuesta esgrimiendo en la esfera privada que ya hay controles suficientes a nivel institucional para ello y apuestan por seguir adelante con su comisión de investigación.