La Universidad de Santiago de Compostela, según recoge Times Higher Education en su listado correspondiente a este año, “repite entre las mejores universidades del mundo”, tal y como han destacado desde la entidad a través de un comunicado.

En este estudio se analizan más de 1.600 instituciones ubicadas en un total de 99 naciones y entre ellas la de Santiago se sitúa en “el intervalo 801-1.000”, en una lista en la que también aparecen otras 53 entidades académicas españolas. En las primeras posiciones se sitúan, entre otras, las de Harvard, Oxford, MIT o Cambridge. 

Según han informado desde la institución compostelana, esta clasificación se prepara en base a trece indicadores de rendimiento divididos en cinco áreas: docencia (30% de la valoración final), investigación (30%), citaciones (30%), proyección internacional (7,5%), y transferencia de conocimiento (2,5%). Precisamente, la proyección internacional “es el aspecto mejor valorado” de la Universidad de Santiago de Compostela, seguido del relativo al impacto de sus citas y de la transferencia de conocimiento.

Por lo que respecta a ese apartado de proyección internacional el ranking valora la habilidad de cada institución para captar alumnado foráneo, así como la proporción de personal procedente de otros países, así como el nivel de colaboradores internacionales. Esto se refiere, en concreto, al número total de publicaciones relevantes que tienen por lo menos un coautor internacional.

Por su parte, la transferencia de conocimiento fija el foco en la capacidad de la universidad para nutrir con innovación a la industria, en tanto que las citaciones ponen en evidencia la influencia investigadora de la USC.

En la edición de este año, Time Higher Education analizaron más de 100 millones de citas de un total de 14,4 millones de artículos de revistas, actas de conferencias, libros y capítulos de libros publicados a lo largo del último lustro.

Este dato considerado muy positivo por los responsables de la Universidad compostelana se conoce cuando todavía no se ha cerrado la polémica por la aprobación en el Parlamento gallego por parte del Partido Popular y con el voto en contra de toda la oposición de la normativa que permitirá crear la primera universidad privada de la región. Sus detractores consideran que es algo innecesario y ponen en duda que no vaya a haber ayudas públicas para una entidad que gestionará la Fundación de Abanca. La Xunta de Galicia ha negado que se vayan a destinar subvenciones a la nueva institución académica.