De nuevo la residencia de DomusVi de Chantada, Lugo, vuelve a estar en el centro de la polémica, aunque en esta ocasión no por cuestiones relacionadas, de forma directa, con el coronavirus, como sucedió hace algunos días e informó en su momento ELPLURAL.COM.

Esta vez, si cabe, el episodio, pasa del dramatismo al escándalo, puesto que tiene que ver con la presunta agresión de la directora de este centro privado a uno de sus residentes. El tema está ya en manos de la justicia, tal y como ha informado la Federación Galega de Asociaciones de Familias e Usuarias de Residencias, REDE.

Según se desprende de la denuncia presentada ante la Guardia Civil, uno de los residentes ha sido objeto de una presunta agresión, además de víctima de coacciones y amenazas. En el escrito presentado se apunta directamente a la directora de la residencia DomusVi de Chantada.

El relato de lo ocurrido comienza el pasado 7 mayo. Siempre según el denunciante, ese día la directora del centro se dirigió a él cuando estaba en su habitación con “un tono de voz muy alto, agitado y exaltado”. El motivo, tal y como indica en la denuncia, serían las informaciones que se habían hecho públicas sobre la situación de los casi 200 mayores residentes a causa de un brote de Covid-19 del que también se hizo eco este medio.

En el escrito presentado ante la Guardia Civil, la máxima responsable del centro “empujó y arrinconó contra la pared” al paciente, quien la conminó a que dejara esa actitud. El denunciante asegura que al día siguiente tuvo la intención de poner el caso en conocimiento de las autoridades, algo que, según dice, no pudo hacer “por los impedimentos de la residencia a que abandonase sus instalaciones”.

En un comunicado de REDE se detalla que, ante esa imposibilidad y esperando a que, al cabo de los días, le permitieran salir de la residencia, el paciente esperó pacientemente. La sorpresa, según Paulino Campos, presidente de la Federación y una de las personas que presentó la denuncia, es que el 12 de mayo, desde la dirección de la residencia se le confiscó el teléfono (antes le habían quitado el ordenador) “y bloqueada la posibilidad de hacer o recibir llamadas”. Al final, el viernes pasado, “logró comunicarse con otro teléfono sorteando los controles de DomusVi y solicitó ayuda a REDE”.

La empresa niega los hechos

Desde DomusVi se señala a ELPLURAL.COM que las acusaciones desde REDE "en nombre de un residente" del citado centro de la localidad lucense y que han sido hechas públicas hoy, así como los hechos en los que se basan "son totalmente infundados, distorsionados y no responden a la realidad".

Las mismas fuentes afirman que "la dirección de la residencia cuenta con el total apoyo de la familia" del mayor que, además, "no duda de la buena gestión realizada por parte de los empleados y la propia dirección". Por último, también anuncian que desde "la dirección del centro se valorará emprender acciones legales frente a las graves acusaciones recibidas".

Ahora mismo, según Paulino Campos, el paciente "se siente amenazado y perseguido” de ahí que solicite “la acción de la Justicia, así como le trasladen a otra residencia”.

Según indican desde la Federación de Asociaciones de Usuarias y Familiares, la Guardia Civil, tras la presentación de la denuncia, se personó en estas intalaciones de Chantada que son las más grandes que este grupo tiene en Galicia “y tomó declaración al paciente, a la directora, y vía telefónica a la familia, testimonios que mañana martes serán remitidos al juzgado de la localidad y a la Fiscalía de Lugo”, en palabras de Campos.