La sanidad es, sin duda, la herencia más envenenada que Alberto Núñez Feijóo ha dejado a su sucesor en la presidencia de la Xunta de Galicia. Los recortes, de los que, según denuncian sindicatos, profesionales, la plataforma SOS Sanidade Pública y colectivos de usuarios, se encuentran detrás del “caos” y “colapso” que ahora mismo afecta no solo a la atención primaria sino también a varios centros hospitalarios de la región.

Desde hace un par de semanas se lleva a cabo en diferentes puntos la recogida de firmas para elevar una iniciativa popular que llegue al Parlamento gallego con el fin de proceder al refuerzo y protección de la sanidad pública.

Sin embargo, las noticias que aparecen en torno a ella generan todavía más incertidumbre entre la ciudadanía.

El último episodio tuvo lugar el pasado 6 de agosto y se cerró con la muerte de una mujer debido a la falta de ambulancia para trasladarla lo que provocó un retraso al tener que llevarla su marido en un vehículo partícular hasta el centro de salud de Baltar, en Portonovo-Sanxenxo. Así lo denunció él mismo ante la Guardia Civil de O Grove.

Este asunto, que investiga el juzgado de instrucción número 3 de Cambados tras esa denuncia, vuelve a ser noticia al desmentir el Servizo Galego de Saúde las circunstancias que habrían rodeado este fallecimiento.

Lo más llamativo es que el Sergas, además de indicar que el hecho luctuoso no tiene que ver con la falta de medios, señala en su versión que la mujer llegó ya muerta al Punto de Atención Continuada de Baltar, añadiendo que estaba en “un estado de bastante deterioro” y “dos horas después” de la llamada en la que se solicitaba una ambulancia para su traslado.

La Asociación Gallega para la Defensa de la Sanidad Pública considera “muy grave” que una persona fallezca “sin atención y pese a demandas asistencia sanitaria”.

La principal conclusión a la que llega esta entidad es que lo ocurrido es una “consecuencia” de la falta de recursos de la Atención Primaria, del servicio de ambulancias y del sistema sanitario público gallego a causa de “los recortes de los últimos años”.

Que Rueda se ponga a trabajar de una vez

Curiosamente, el lunes de esta misma semana esta Asociación anunció, a través de su delegación en Sanxenxo, el “cierre de las agendas de todos los médicos” del centro de salud de Baltar a lo largo del mes de agosto para “consultas, renovar recetas o emitir las bajaas laborales”.

A juicio de los defensores de la sanidad pública gallega, este gesto es una muestra más de la “incapacidad” del Sergas y la Gerencia de Área para “planificar la Atención Primaria”, además en un punto donde la población se multiplica por mucho debido al turismo.

Sobre este asunto se pronunció también hoy el secretario general de los socialistas gallegos. Valentín González Formoso lamentó el fallecimiento de esta mujer “por no disponer de ambulancia medicalizada”, remarcando que es inadmisible que “una persona fallezca por falta de recursos en la sanidad”.

Precisamente, Formoso recordó las “ocurrencias” de la Xunta con este área sanitaria como la de “ofrecer pisos a los médicos de fuera para que trabajaran allí en la temporada estival”.

La situación por la que atraviesa la sanidad pública de Galicia y a la que se llega tras años de reclamaciones y advertencias por parte de profesionales y usuarios llevó este viernes al líder de los socialistas a reclamar que, de una vez por todas, la “Xunta tome medidas contundentes”. Según sus palabras, es necesario que el presidente de Galicia, Alfonso Rueda “afronte la realidad” y “se ponga a trabajar de una vez” ante un tema tan importante como este.

Hoy mismo, ante la aparición de las justificaciones de la Xunta a través del Sergas por la muerte de esta mujer en el PAC de Baltar, la Plataforma Gallega en Defensa de la Sanidad Pública reiteró su “sentido pésame a la familia de la fallecida” e informó de la celebración de una reunión el próximo lunes 22 para abordar la “deriva que está tomando este desmantelamiento contínuo de nuestra sanidad”.