Hace tan solo unos días la vicepresidenta y conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez daba un espaldarazo al colectivo de cazadores gallegos destacando su papel “en el control de la fauna y la preservación de los ecosistemas silvestres”, tal y como subrayaron en un comunicado publicado desde este departamento de la Xunta de Galicia.

Vázquez realizó estas manifestaciones en el marco de la entrega de certificados de formación de la Federación Gallega de Caza. Entre otras cuestiones, la conselleira del Gobierno de Alfonso Rueda subrayó la importancia de este tipo de formación promovida por la Federación en campos como el de la prevención de accidentes o las enfermedades de la fauna cinegética.

La respuesta a este y otros actos que, según las organizaciones naturalistas, ponen de relieve el respaldo del Ejecutivo autonómico a lo que denominan como el 'lobby de la caza', la ha ofrecido la delegación gallega de la Fundación Franz Weber.

Esta ong recuerda que la Xunta de Galicia y, en concreto, la Consellería dirigida por Ángeles Vázquez, “lleva varias semanas intensificando su agenda con los cazadores”. Menciona la Fundación en este sentido “reuniones en San Caetano”, a lo que añade las críticas vertidas con la Ley estatal de Protección Animal, también cita lo que califica como “comilonas tras pseudocampeonatos” o la participación de la propia Vázquez “en una entrega de 'diplomas'”, en referencia a la citada entrega de certificados celebrada el pasado viernes.

Ante estas actitudes, la entidad animalista insta al Gobierno gallego que, de una vez por todas, deje de “adular” a un “lobby ultraminoritario”. Precisamente, uno de aspectos que más critican esta y otras organizaciones del sector es la cantidad de gente que forma parte del colectivo de cazadores, que “representa cada vez a menos personas” y, según Franz Weber, se ha hecho acreedor de “un importante rechazo” de la población gallega debido a “sus negligencias y desmanes”.

En relación con este, la Fundación indica que la Xunta de Galicia concede año tras año “decenas de miles de euros a una Federación oficialista para financiar, entre otras medidas, la compra de bolígrafos, chalecos y gorras”. Asimismo, ese dinero se destina también a “un contenido formativo apenas suscrito por los propios federados, con un nivel de participación ínfimo”, en clara referencia al mencionado acto en el que participó la conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda hace tan solo unos días en la sede de la Federación.

Defienden sus afirmaciones los naturalistas apoyándose en el Comité de los Derechos del Niño para “recomendar” a los responsables de este departamento autonómico que presten más atención a lo que dicen organismos o normativas internacionales.

Así, con respecto a ese Comité le piden a la Xunta que haga caso al comentario publicado en agosto de este año centrado en el “derecho de la infancia y adolescencia a un Medio Ambiente sano, incluyendo varias peticiones relacionadas con la materia a todos los Estados parte”.

La Fundación hace mención al “Derecho a no ser objeto de ningún tipo de violencia", añadiendo que "(...) Hay que proteger a los niños de toda forma de violencia física y psicológica y de la exposición a la violencia, por ejemplo la doméstica o la infligida a los animales".

El colectivo animalista relaciona esta afirmación con “diferentes prácticas de crueldad o violencia, donde personas menores de edad son testigos del sufrimiento de los animales en entornos naturalizados, por ejemplo la caza”.

En el caso específico de la Xunta, según FFW la administración regional lo tendría fácil para aplicar esta petición de Naciones Unidas, “a partir de la reforma de la actual Ley de Caza”. Dicha modificación prohibiría que personas menores de edad “puedan ser acompañantes o participantes en cualquier tipo de batida o pseudocampeonato”.

“Hasta ahora el Gobierno de Alfonso Rueda ha ignorado” esto, se lamenta la Fundación Franz Weber.