Un año y medio después del inicio de la fase de instrucción el alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, único investigado en la causa, no había rendido cuentas con la justicia por la querella por delitos de injurias y calumnias (artículos 216 a 205 del código penal español) que interpuso la concejal socialista María José Valés, en septiembre de 2023, cuatro meses después de las elecciones municipales.
Un retraso y lentitud judicial que, tratándose de una cuestión de garantías procesales, no preocupaba al propio investigado, el alcalde de Vilanova de Arousa. Más bien todo lo contrario. Durante ese tiempo se ha reiterado de las acusaciones por presuntos delitos de corrupción contra la concejal socialista, María José Vales. Las mismas que le mantienen como investigado.
Una fase de instrucción caracterizada por su lentitud injustificada
Una querella y un proceso de instrucción que, si se ha caracterizado por algo desde su comienzo, ha sido por su lentitud, su dilación injustificada de la que el único beneficiado ha sido el investigado.
Solo hay que echar la vista atrás y analizar los tiempos.
7 meses tuvieron que pasar desde la interposición de la querella contra Gonzalo Durán para que la titular del Juzgado nº1 de Vilagarcía de Arousa, doña Sofía Leonor Castro Verdes, la admitiera a trámite. Más de medio año únicamente para arrancar la fase de instrucción.
Teniendo en cuenta lo anterior, no es de extrañar que, en lo posterior, la investigación, los tiempos se hayan estirado como un chicle, dilatando el procedimiento, es decir, dilatando las acciones judiciales. Una situación que en este caso resulta favorable para el investigado, que es el único beneficiado.
Sin embargo, todos los demás salen perjudicados.
Incluyendo a la justicia, o más bien a la percepción del ciudadano sobre la imparcialidad de esta institución [mejor dicho, la ausencia de ésta] al ver determinadas actuaciones forzadas, o inacciones intencionadas que buscan un fin más político que judicial.
Últimamente, la actualidad nos lo recuerda con frecuencia, pero no debemos olvidar que: cuando se prolongan los tiempos en un procedimiento judicial de manera injustificada en casos de alto impacto político, equivale a un uso estratégico de la justicia para apartar competidores, que vulnera el derecho a un proceso sin dilaciones, la presunción de inocencia práctica y el derecho a la participación política, ejemplos no faltan.
El caso que nos ocupa podría ser un buen ejemplo de una dilación injustificada de una investigación: 18 meses en los que tan solo se había tomado declaración a la querellante, la socialista María José Valés, y se había solicitado documentación a la Cofradía de Pescadores de Vilanova relativa a la causa. No olvidemos que los presuntos delitos de corrupción de los que el alcalde de Vilanova acusa a su adversaria se remontan a su etapa como patrona Mayor al frente de la corporación.
Gonzalo Durán ¿reta a la justicia?
Se reitera públicamente en las acusaciones delictivas sobre María José Vales que le mantienen como investigado.
Resulta especialmente llamativa esa lentitud judicial si tenemos en cuenta que en los últimos 2 años, el regidor no ha dejado de señalar y acusar a la concejal socialista de presuntos delitos de corrupción en su etapa al frente de la Cofradía de pescadores, tanto es así, que hace un par de meses, un periódico local publicaba un artículo de Gonzalo Durán, que recogía las mismas acusaciones delictivas que le valieron en su día la querella que le mantiene como investigado en la causa, y las mismas acusaciones delictivas que el 7 de marzo de 2023, dos meses antes de las elecciones municipales, el Patrón Mayor de la Cofradía, Rosalino Díaz, llevó ante la Fiscalía de Pontevedra e instó a que se investigara.
El artículo incorporaba un vídeo en el que Gonzalo Durán reta de nuevo a la justicia, y durante más de dos minutos suelta un discurso con frases como esta: "durante su etapa [ocho años] como patrona mayor de la Cofradía se cogió dinero de la caja” y añadía: “existe un malestar en el pueblo al respecto de asuntos como la venta de almeja fuera de lonja, salarios que iban a devolver y no devolvieron, la externalización del servicio de grúas en el puerto…”. Estas son solo algunas de las muchas imputaciones de presuntos delitos de corrupción que el regidor atribuye a María José Vales durante su etapa como Patrona Mayor al frente de la Cofradía de pescadores de Vilanova de Arousa.
Pero el alcalde no sólo difunde públicamente estas acusaciones en medios de comunicación, sino que también usa sus redes sociales, abiertas al público, para el mismo fin. Hace un par de meses no se cortaba subiendo un vídeo en el que se reiteraba en sus difamaciones e insultos sobre la portavoz socialista.
Y como es habitual en Gonzalo Durán, que siempre guarda un as en la manga, en esta ocasión decepcionó ya que acompañó sus declaraciones en el vídeo, así como su declaración ante el Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 1 de Vilagarcía, de un acta de la Cofradía de 2022 que, según él, es la prueba que demuestra la culpabilidad de la socialista, es la prueba de que él no miente. Pero más adelante veremos que el documento no es nada nuevo, y tampoco revelador.
La declaración en calidad de investigado del alcalde de Vilanova: Decepcionante
18 meses han tenido que pasar para que el alcalde de Vilanova rinda cuentas ante la magistrada por la querella que le mantiene como investigado. Gonzalo Durán declaró el pasado 30 de octubre ante La titular del Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 1 de Vilagarcía, doña Sofía Leonor Castro Verdes, tras un año y medio de fase de instrucción.
El popular contestó a preguntas de su propio abogado y de la jueza, adelantando que no respondería a las que formulase la representación de la acusación. En el acto, bastante breve, el regidor se reafirmó en su tesis: que no calumnió a la socialista cuando dijo, en campaña de las municipales de 2023, que Vales tenía una causa abierta por su gestión al frente de la Cofradía de Pescadores de Vilanova de Arousa. Una campaña electoral en la que Durán, candidato popular, realizó graves acusaciones delictivas hacia la portavoz socialista mostrando unas diligencias como prueba que fueron archivadas antes de finalizar la campaña electoral. Pues bien, el regidor no cesó y eso le valió la querella que le mantiene como investigado.
El eje central de su defensa giró en torno a dos asuntos: la existencia de un acta de la Cofradía de 2022, divulgada por el propio Durán semanas atrás en redes sociales y medios de comunicación, y la ratificación por parte del Patrón Mayor al alcalde de Vilanova de la imputación judicial de María José Vales, su antecesora en el cargo, por presuntos delitos de corrupción.
Sin embargo, si analizamos el contenido del documento, y nos fijamos en el recorrido que ha tenido en su paso por el Juzgado anteriormente, es fácil deducir que no debe ser tan revelador como el alcalde piensa que es, porque no demuestra la comisión de los delitos que le atribuye a María José Vales y por los que está investigado.
Y no lo digo yo, lo dijo el fiscal jefe de Pontevedra, Juan Carlos Aladro, en mayo de 2023 cuando remitió un escrito al juzgado solicitando el archivo.
Acta de la cofradía de diciembre de 2022
`La prueba irrefutable´, según el alcalde, que la justicia ha desestimado anteriormente como medida probatoria de los delitos de corrupción atribuidos a la concejal socialista
El Acta de la Cofradía con fecha de 20.12.2022, presentada a la titular del Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 1 de Vilagarcía, doña Sofía Leonor Castro Verdes, el pasado 30 de octubre por el investigado, Gonzalo Durán, no es un escrito nuevo que se aporte a la causa.
LA PRIMERA VEZ que esta acta llega a los juzgados lo hace como parte de la documentación adjunta que presentó el Patrón Mayor cuando alertó a la fiscalía de Pontevedra de supuestos cobros irregulares en el seno de la Cofradía cuando María José Vales estaba al frente. Una denuncia que interpone el 7 de marzo de 2023, dos meses antes de las elecciones municipales, que el Ministerio fiscal remite al Juzgado nº2 de Vilagarcía de Arousa, donde se inició el proceso de instrucción.
En las diligencias, aparecía la candidata socialista, acusada de presuntos delitos de corrupción cuando estaba al frente de la Cofradía, cuando era otra persona, la vice patrona, la que tenía que figurar ahí, [oh casualidad]. A día de hoy, no sabemos con certeza quién coló el nombre de María José Vales en esa diligencia. El Patrón niega haber nombrado a la concejal socialista cuando denunció ante Fiscalía.
El fiscal jefe de Pontevedra, Juan Carlos Aladro, acabó admitiendo que se trataba de "un error" y lo corrigió, desapareciendo el nombre María José Vales, pero hasta ese momento, y después también, el candidato popular se sirvió [y se sirve a día de hoy también de ellas], para condenar pública y socialmente a su rival, más aún cuando los medios de comunicación, como la prensa local, se hacen eco de sus acusaciones durante la campaña electoral, y posteriormente.
El candidato del PP se escudó en esa denuncia para tratar de aniquilar a su adversaria, María José Vales. Fue su única estrategia electoral. La apertura de una investigación judicial contra la socialista fue para Gonzalo Durán, candidato popular, la herramienta perfecta para combatirla en la campaña electoral.
Una denuncia que tuvo poco o nada de recorrido porque fue archivada por el Juzgado nº2 de Vilagarcía de Arousa un mes después ¿Por qué? El fiscal jefe de Pontevedra en ese momento, a través del juzgado, emitió un auto de archivo por falta de pruebas, o mejor dicho, por la imposibilidad de comisión del delito que se le atribuye a María José Vales, menos aún por la vía penal.
LA SEGUNDA VEZ que el acta de la Cofradía de 2022 aportada hace dos semanas por el investigado, Gonzalo Durán, aterrizó en el Juzgado fue en plena campaña electoral de las municipales de 2023. Es decir, un mes más tarde que la anterior. Esta vez no es el Patrón Mayor de la Cofradía, Rosalino Díaz, el que la lleva, sino 12 miembros de la Junta General muy afines a él. La denuncia fue contra la vice patrona mayor de la Cofradía de Pescadores de Vilanova en la etapa en la que María José Vales estaba al frente.
Según los denunciantes, los presuntos cobros irregulares, los recibía la vice patrona, pero María José Vales, Patrona mayor en ese momento era supuestamente conocedora de la irregularidad que se estaba cometiendo.
El Juzgado de instrucción nº2 de Vilagarcía de Arousa, acumuló esta denuncia a la anterior del Patrón Mayor, y de nuevo archivó el asunto.
La fiscalía puso en conocimiento del alcalde de Vilanova el archivo de la causa judicial. La decisión de hacer partícipe al regidor del carpetazo que la justicia había dado al procedimiento contra la socialista tenía un objetivo claro: que él hiciera lo mismo. Que cesara en las difamaciones sobre su rival porque la socialista no tenía cuentas pendientes con la justicia. Pero él ha hecho caso omiso al Ministerio Fiscal, y no ha parado en estos dos años y medio de repetir públicamente acusaciones delictivas sobre María José Vales que ya han sido archivadas con anterioridad.
Dos años y medio después, el acta de la Cofradía de 2022 reaparece por tercera vez en otro procedimiento judicial. En esta ocasión es el alcalde de Vilanova el que aporta el documento. Lo hace el pasado día 30 de octubre cuando acude a declarar ante la titular del Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 1 de Vilagarcía, doña Sofía Leonor Castro Verdes en calidad de investigado por presuntos delitos de injurias y calumnias contra María José Vales, candidata socialista, y su principal rival en las últimas elecciones municipales.
A su salida del Juzgado, el alcalde de Vilanova se paró ante los medios de comunicación locales que le esperaban, y afirmó: «me he ratificado en lo que he dicho, porque no hay calumnia, además de presentar el acta donde la vice patrona mayor de Vales reconoce que cobró irregularmente y que la patrona lo sabía, así que no he dicho nada que no fuese verdad».
Y cabe preguntarse… si en las dos primeras veces que se presentó el Acta en el juzgado como prueba, no sirvió para demostrar la comisión de los delitos de los que se acusaba a María José Vales. Ni tan siquiera la existencia de éstos… ¿Por qué ahora es una prueba irrefutable según el alcalde? ¿Qué ha cambiado? ¿De qué delito cometido por María José Vales es prueba el acta de la Cofradía? DE NINGUNO. Y repito, no lo digo yo, lo dijo el Fiscal jefe de Pontevedra, Juan Carlos Aladro, que solicitó a través de un escrito al juzgado el archivo del procedimiento.
En definitiva, la justicia ha desestimado anteriormente el ACTA DE LA COFRADÍA DE DICIEMBRE DE 2022 como medida probatoria de los delitos de corrupción atribuido a la concejal socialista, LO ESPERABLE sería, que el acta no tuviera recorrido en la investigación, pero… “la realidad muchas veces supera la ficción”. Veremos…
Gonzalo Durán tira de manual de estilo del PP: no lo sé, no me consta o en su caso… no me enteré
Durante la campaña electoral de 2023 el alcalde de Vilanova y candidato popular había apoyado sus acusaciones en las diligencias del juzgado que tenían como investigaba a la candidata socialista, pero una vez archivadas por ausencia de pruebas y por tanto de comisión de delito penal posible, seguir tirando de ellas públicamente suponía saltarse lo establecido en la ley.
Es sencillo: si Gonzalo Durán, después de que se archivaran la denuncia contra María José Vales, interpuestas por el Patrón y posteriormente, por los 12 miembros de la Junta General de la Cofradía afines al Patrón Mayor, y habiendo sido informado de dichos archivos, se reiteraba públicamente de sus acusaciones delictivas hacia Vales [PSdG], estaría incurriendo en delito.
“El que avisa, no es traidor”, y Gonzalo Durán estaba más que advertido. Él no paró y siguió acusándola de corrupción públicamente, y ella se querelló contra él. Y aquí es donde nos encontramos ahora.
Sin embargo, el regidor en su declaración afirma que “no tuvo forma de saber que se habían archivado las diligencias contra la socialista”. Algo poco o nada creíble, porque el fiscal, en mayo de 2023, fue claro: María José Vales no tenía pendiente ningún asunto con la justicia.
Pero vamos a suponer que el alcalde de Vilanova, que todo lo sabe, no se enteró del archivo de las diligencias en las que se escudaba para acusar a Valés de presuntos delitos de corrupción.
Suponiendo esto, resulta increíble pensar que no se enterara de nada porque él declara que es el Patrón Mayor de la Cofradía el que le confirma que la concejal socialista estaba en calidad de investigada, y ¿no le comunicó después que se había archivado la causa? En los dos años y medio que han pasado desde el archivo de la denuncia ¿El Patrón Mayor no le ha dicho al alcalde que la justicia había dado carpetazo a las diligencias contra la socialista?
Pero menos creíble resulta la excusa del alcalde de Vilanova de que no se enteró del archivo de las diligencias, para haber seguido acusando todo este tiempo de corrupción a María José Valés, si tenemos en cuenta que lo llevaron todas las portadas de periódicos locales y autonómicos gallegos. Esos periódicos a los que él convocó en numerosas ocasiones para realizar sus acusaciones, se hicieron eco también del archivo de la denuncia. A la hemeroteca me remito.
Continuamos con el manual de estilo del PP
El alcalde le pasa “la patata caliente” al Patrón Mayor de la Cofradía
En su declaración ante la juez, el alcalde de Vilanova afirmó que, después de recibir las diligencias contra la socialista en el buzón de su casa en plena campaña electoral, preguntó en la Cofradía de Pescadores de Vilanova de Arousa por las acusaciones delictivas que contenía, y allí le dijeron que: SI estaba imputada [María José Vales] por esos delitos de corrupción, algo que también le habría ratificado el propio patrón mayor, Rosalino Díaz.
El alcalde declara que el Patrón le dijo que doña María José Vales Martínez [PSdG] “estaba imputada por estos delitos de corrupción, y que era público y notorio…”. Un dato que el regidor decidió hacer público. Tanto es así que convirtió sus acusaciones delictivas contra María José Valés, su rival en las elecciones municipales que se celebraban en diez días, en el único asunto que el candidato del PP empleó en el “spring” final para tratar de ganar las elecciones.
En definitiva, el alcalde de Vilanova de Arousa declaró el pasado 30 de octubre ante La titular del Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 1 de Vilagarcía, doña Sofía Leonor Castro Verdes, basando su defensa en unas diligencias que llegan de forma anónima a su buzón contra María José Vales por presuntos delitos de corrupción, que además le confirma el Patrón Mayor de la cofradía, y aporta como prueba un acta de la Cofradía de 2022 [que se desconoce cómo ha llegado a su poder].
Una estrategia de defensa
Endeble, cobarde, irresponsable y, como no podía ser de otra manera… sorprendente en su remate
Si analizamos la estrategia de defensa del alcalde de Vilanova en su declaración ante la magistrada podemos deducir algunas conclusiones: Se trata de una estrategia de defensa un tanto endeble si tenemos en cuenta que tanto las diligencias, como el acta de la cofradía ya han sido archivados por el Juzgado con anterioridad. No hay nada nuevo.
Una estrategia de defensa un tanto cobarde, porque le pasa “la patata caliente” al Patrón Mayor de la Cofradía de pescadores, Rosalino Díaz, poniendo en su boca las acusaciones por las que él, Gonzalo Durán, está investigado. Le pasa el marrón.
Una estrategia de defensa que, además de cobarde y endeble, es irresponsable por su parte, porque una vez archivadas las diligencias contra María José Vales, seguir acusándola públicamente de cometer los presuntos delitos de corrupción, como ha hecho el regidor los dos años y medio posteriores al archivo suponía saltarse lo establecido en la ley. Más aún si “la prueba irrefutable” [el Acta de la Cofradía de 2022] que presenta ante la titular del Juzgado nº1 de Vilagarcía de Arousa, doña Sofía Leonor Castro Verdes, no ha demostrado los delitos de los que la acusa Gonzalo Durán, en procedimientos anteriores.
Y una estrategia de defensa con sorpresa incluida, como no podía ser de otra manera tratándose del alcalde de Vilanova. Se libró de prestar declaración ante la juez el pasado 17 de julio,14 meses después de iniciarse la instrucción de la querella, por solicitar una “serie de documentación que, nos consta, está en otro juzgado, de denuncias contra María José Vales”, que alegaba el propio Durán a la prensa local que lo esperaba ese día a la salida del Juzgado. Una petición que la titular del Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 1 de Vilagarcía, doña Sofía Leonor Castro Verdes, aceptó señalando que solicitaría la documentación relativa a la denuncia contra Valés (que se encontraba en el Juzgado número 2, ubicado en el mismo edificio) y volvería a llamar a declarar al alcalde una vez constase ésta.
La repentina amnesia del alcalde de Vilanova
Pues bien, esa declaración es la del pasado 30 de octubre, en la que Gonzalo Durán parece sufrir amnesia, porque la magistrada le pregunta por ese asunto que usó él para retrasar su declaración, y resulta que ahora, según señaló su defensa, desconoce esa causa, desconoce al instructor de ésta, el Sargento de la Guardia Civil, y al denunciante.
Si, si, queridos lectores, han leído bien: Después de haberse beneficiado el alcalde del procedimiento en fase de instrucción abierto contra María José Vales, en ese momento, en el Juzgado nº2 de Vilagarcía de Arousa, para no declarar en julio, al pedir a la jueza que solicitara la documentación relativa a este asunto, ahora resulta que desconoce esa causa, al instructor de ésta, el Sargento de la Guardia Civil, y al denunciante. Primero pide la documentación relativa a la causa, y… ¿ahora no sabe de qué le habla la jueza?
Y lo mejor de todo, los hechos que recoge la denuncia que instruye el Sargento, y que remite al Juzgado número 2 de Vilagarcía, son los mismos que ha empleado el alcalde en sus acusaciones y que le mantienen hoy en día en calidad de investigado. Solo esa razón ya valdría para entender que, por supuesto que el alcalde de Vilanova sabe muy bien de ese procedimiento, del denunciante y del Instructor.
¿A qué documentación en otro juzgado se aferró Durán para no declarar el pasado 17 de julio?
La denuncia
La denuncia contra la portavoz socialista, a la que se aferró Gonzalo Durán para aplazar su declaración, incide en unas acusaciones que fueron archivadas en su día por el Juzgado, volver a investigarlas cuando no tienen fundamento alguno es hacer perder tiempo y dinero a la justicia, que, por cierto, no le sobra, más bien todo lo contrario.
¿Quién es el denunciante?
“Se trataría de un amigo íntimo del Sr. Patrón Mayor de la Cofradía en la actualidad, reconocido militante del Partido Popular en Vilanova de Arousa y titular de una empresa de transporte que opera en el puerto de Vilanova de Arousa desde hace años”, según recogen los escritos presentados ante la fiscalía por la portavoz socialista. Este último dato señalado sobre el denunciante es importante si nos fijamos en los hechos que se denuncian
¿Cuáles son los hechos que se denuncian?
“María José Valés, durante el tiempo que fue Patrona Mayor de la Cofradía, habría burlado el mecanismo del concurso público para la adjudicación del servicio de grúa en el puerto de Vilanova de Arousa” incurriendo en un presunto delito de prevaricación en concurso, tráfico de influencias y administración desleal.
Contenido de la denuncia
Si analizamos el contenido y nos fijamos en la acusación contra Valés que recoge la denuncia, encontramos un error grave que acabaría de un plumazo con la misma… ¿Por qué? Porque se acusa a María José de un delito de prevaricación en concurso público que, en este caso, no se puede dar. Es imposible burlar el mecanismo de concurso público ante la inexistencia de concesión administrativa alguna por el ente portuario.
¿Por qué ahora el alcalde de Vilanova se desentiende de esa denuncia, del denunciante, y del instructor, el Sargento de la Guardia Civil?
Los hechos se denuncian en abril de 2024 ante el puesto de la Guardia civil en Vilanova de Arousa.
Y cabe preguntarse… ¿Por qué el Sargento de la Guardia civil del puesto de Vilanova, ante la inconsistencia de las acusaciones, o la imposibilidad misma de ellas, sigue con la investigación y remite la misma a un Juzgado?
No se puede entender de forma objetiva e imparcial, que el Sargento de la Guardia Civil remita al Juzgado unos hechos que además ya han sido archivados con anterioridad por el mismo a petición de FISCALÍA, más aún si no hay nada nuevo que aportar que permita abrir una línea de investigación en la que centrarse.
Pero aún se entiende menos [o más, según se mire] que la magistrada admita a trámite la denuncia, abriendo un periodo de instrucción de un año en el que NO se practica diligencia alguna, pero que concluye manteniendo a Valés en calidad de investigada. ¿En base a qué?, esta es la gran pregunta.
¿A qué se debe la amnesia repentina del alcalde de Vilanova?
¿Qué ha ocurrido entre julio y diciembre? para que su interés y expectación por la documentación relativa a la denuncia que remite el Sargento de la guardia civil contra María José Vales, y que Durán solicitó a la jueza que reclamara al juzgado de al lado para eludir declarar ese día, se haya transformado en desconocimiento y pasotismo. Preguntado el pasado 30 de octubre por la jueza sobre este asunto, el alcalde dice que no conoce el procedimiento judicial al que se refiere, ni al denunciante, ni, lo mejor de todo, al Instructor, el ya famoso Guardia Civil que instruye la denuncia sobre unos hechos archivados un año atrás.
Después de un año y medio de espera, la declaración del alcalde abre varios interrogantes, y esclarece poco o nada la investigación. Tira mucho de manual de estilo del PP, sorprende con una repentina amnesia, y aporta un documento que hace tiempo el juzgado archivó. Por ello, la representación de la acusación ha solicitado a la titular del Juzgado nº1 de Vilagarcía de Arousa, doña Sofía Leonor Castro Verdes, que cite a declarar al Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores A Pastoriza de Vilanova de Arousa, y al Sargento de la Guardia Civil, además de aportar más documentación. Ahora la atención se centra en la magistrada a cargo de la investigación, ella tiene la última palabra…