La Delegación del Gobierno en Madrid impondrá una multa de 600 euros a los organizadores de la marcha neonazi que el pasado sábado recorrió las calles de Chueca. La Fiscalía se encontraba investigando si las consignas que se proclamaron contra el colectivo LGTBI eran constitutivas de delito.

Este martes, la delegada del Ejecutivo en la Comunidad, Mercedes González, ha detallado que se impondrá a quienes convocaron la concentración sanciones administrativas de 600 euros, lo máximo que permite la ley. Asimismo, se ha incoado expediente sancionador de 800 euros a seis de las personas que participaron por un delito contra la Ley de Seguridad Ciudadana, ya que portaban bengalas, palos y un puño americano.

González ya ha remitido el informe realizado por la Policía Nacional al órgano competente, que se encuentra estudiando si la marcha es concluyente de un delito de odio. La manifestación se organizó, presuntamente, contra las Agendas 2030 y 2050, aunque derivó en insultos graves hacia el colectivo LGTBI. Durante el transcurso de esta entre la Puerta del Sol y el barrio de Chueca se lanzaron proclamas como “Fuera sidosos de Madrid” o “Fuera maricas de nuestros barrios”.

Organizada por la asociación Madrid Seguro, de ella participaron grupos de corte neonazi como la Asociación de vecinos de San Blas Canillejas; la Asociación de vecinos de Villamantilla; la Asociación de vecinos de Coslada y San Fernando de Henares, el partido España 2000; Juventud Nacional; la Plataforma El Pueblo por la Verdad; la Plataforma Cultural-ñ; la Plataforma por la Dignidad, la Libertad y la Vida; y el Partido Orden y Ley (POLE) y Getafe NR.

Todos los partidos políticos mostraron su repudia a este hecho, aunque Vox ha insinuado que fue un bulo por parte del Gobierno que "apestaba a cloaca socialista", opinión que comparte sobre las balas que hace meses recibieron varios miembros del Ejecutivo.