Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, ha rechazado realizar un “frente común” como propone el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, con la inclusión de otros presidentes autonómicos socialistas como el de Asturias, Adrián Barbón.
Page ha asegurado que “no hay que hacer ningún frente de autonomías”, ya que “se va a dar con naturalidad una posición muy común, porque estamos muy de acuerdo casi todos en lo que no queremos”, añadiendo que no tiene el más mínimo inconveniente en hablar con el presidente andaluz pero que este tema “no se puede derivar a un interés de partido”, ya que hay muchas más Comunidades Autónomas gobernadas por el Partido Popular, y rechazaba tajantemente acudir en frente común al rechazo de la financiación singular: “A mí en ese foro no me van a ver”.
Con los valores y desde la izquierda, el más sagrado de todos, que es la igualdad, con los valores no se puede mercadear
El rechazo al frente común no le ha eximido a Page de volver a cargar contra el acuerdo para la financiación singular de Cataluña. Para el presidente de Castilla-La Mancha, es vergonzoso que personas que se identifican como “de izquierdas” negocien competencias con la extrema derecha catalana de Puigdemont.
“Con esto no se juega y no lo vamos a admitir. No vamos a permitir que se negocien porque estos valores vienen nítidos en la Constitución”, aseguraba Page en un rechazo frontal al acuerdo de financiación singular que también compartía Fernando Clavijo, presidente canario. Clavijo asegura, al igual que Page, que no se puede romper la “caja común” y que detrás de estas concesiones está la educación, la sanidad u otros servicios públicos básicos que hay que cubrir.
Ambos lamentan que después de un modelo de financiación autonómica obsoleto y desfasado desde hace 11 años y que urge renovar, el tema haya sido puesto encima de la mesa cuando ha querido el separatismo catalán.
En este sentido, Page insta a escuchar al exministro Josep Borrell, uno de los mayores expertos en Hacienda a su juicio, que asegura que califica el acuerdo como “cupo catalán”: "Lo que tienen que hacer es hacer caso a Borrell, que en este caso creo que sabe muchísimo más que la mayoría de los que se sientan a discutir y a negociar. Y yo desde luego tengo muy claro, discrepando en otras muchas cosas con el exministro, que eso no se lo puede pasar por alto a nadie”.
No cometan el error de hacer el gasto político para irle ganando tiempo al tiempo
El presidente de Castilla-La Mancha se reafirma en que el acuerdo no va a salir porque es inconstitucional y porque la mayoría de las Comunidades Autónomas lo rechazan. Es ahí donde lanza la petición al PSOE para que “no haga el ridículo”, sabiendo que no va a salir adelante, y ponga en juego el gasto político y el electoralismo, simplemente por intentar agotar la legislatura.
Page asegura que esta cuestión lleva al Gobierno a un callejón sin salida, y sobre una hipotética reunión entre Pedro Sánchez y Carles Puigdemont fuera de las fronteras de España, asegura que es un síntoma de que el catalán ha perdido la esperanza de volver, que si lo hace tiene que ser detenido, que es el propio Gobierno quien tiene que guardar las formas, y que “bastante bochorno es ver a mucho políticos ir en romería a reunirse con él”.
Es una rosa con muchas espinas, pero tienen que intentarlo
Page ha deseado suerte a la vicepresidenta María Jesús Montero en la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado para 2026. Asegura que será complicado y habrá que aumentar el gasto en defensa como ya se viene haciendo debido a la presión de la Unión Europea, pero dice que es algo “que tienen que hacer”.
Donde pone el foco y afirma sentirse con miedo es en las concesiones que los Presupuestos Generales del Estado puedan implicar, ya que “desde hace ya tiempo, lo que vemos es que lo que se escribe con letras mayúsculas son los peajes y la letra pequeña es el presupuesto, cuando tendría que ser al revés”, y lamenta que se pueda llegar a preferir que no salgan en un futuro si incluyen demasiadas cesiones.
Eso sí, Page defiende que la presentación de los Presupuestos Generales del Estado no es más que el cumplimiento de la ley al que está obligado el Gobierno y espera que esta legislatura no sea la única de la historia de España ni de las democracias europeas que no consigue aprobar unos presupuestos.
Tiene argumentos para defenderse
Por último, el presidente de Castilla-La Mancha ha esgrimido que el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, se defienda ya que este considera que está siendo víctima de ataques personales. Sin embargo, señala que se da lugar una “paradoja”, y es que si un cargo inferior es encausado, el fiscal general del Estado está en la obligación de cesarlo automáticamente, pero si es él el enjuiciado, la ley no recoge esta posibilidad: “Creo que el fiscal se tendría que aplicar la misma doctrina que él está obligado a aplicar a un subordinado. Por una cuestión lógica”.