El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha planteado este miércoles la necesidad de establecer encuentros mensuales entre los presidentes autonómicos para reforzar la coordinación territorial y avanzar hacia un modelo autonómico "más eficiente". A su juicio, estas reuniones deberían celebrarse “independientemente de que esté o no el presidente del Gobierno”, con el objetivo de construir una agenda compartida entre comunidades.
Así se ha pronunciado, a preguntas de los periodistas, tras la reunión mantenida en Bruselas con el comisario europeo de Agricultura, Cristophe Hansen y ante el anuncio del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de convocar para el próximo 6 de junio la Conferencia de Presidentes en Barcelona, medio año después de la última reunión, mantenida en Santander en diciembre del pasado 2024.
García-Page ha reclamado que estos foros no se conviertan “en un teatro” donde cada participante actúe de cara a su electorado, sino en espacios lo más útiles y productivos posibles para las comunidades autónomas.
Exije fechas y calendarios concretos para abordar el sistema de financiación autonómica
En este contexto, ha reclamado que se fijen “fechas y calendarios concretos” para abordar de forma seria la reforma del sistema de financiación autonómica, una cuestión que considera urgente y que no puede resolverse “con privilegios ni mesas aparte”.
García-Page también ha sugerido avanzar en una estrategia común de armonización de competencias, desligada de enfrentamientos ideológicos, que permita una mayor cooperación entre comunidades sin depender exclusivamente de reuniones esporádicas. Ha recordado que durante la pandemia, la interlocución entre presidentes autonómicos fue más ágil y coordinada, y ha defendido retomar ese espíritu de colaboración de hace años.
Finalmente, ha insistido en que espera poder incluir en el orden del día de la reunión de junio una cuestión que lleva meses planteando, que no es otra que la reforma del sistema eléctrico nacional y que considera que, tras el apagón sufrido el pasado 28 de abril, este debate debe ocupar un lugar prioritario en la agenda.
La XXVIII Conferencia de Presidentes tendrá lugar en el Palau de Pedralbes de Barcelona, cumpliendo así con el ofrecimiento realizado por el president de la Generalitat, Salvador Illa, en la anterior cumbre. Según ha adelantado el Gobierno, este jueves se informará a las comunidades de los detalles de la convocatoria y, posteriormente, se celebrará un comité preparatorio para fijar el orden del día.
La última vez que el presidente del Gobierno se reunió con los líderes autonómicos fue en diciembre de 2024, en Santander. Aquella convocatoria puso sobre la mesa asuntos de gran calado como la política de vivienda, la reforma de la financiación autonómica y la gestión de los flujos migratorios. Sin embargo, la cumbre se cerró sin avances significativos ni compromisos concretos en ninguno de esos ámbitos. Esa cita se producía tras un largo paréntesis de casi tres años desde la anterior Conferencia de Presidentes.