El presidente del Partido Popular en Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha tratado de abrir este martes un debate sobre el futuro uso que se le dará al edificio del Hospital Virgen de la Luz de Cuenca, que quedará vacío durante los próximos meses cuando culmine el traslado al nuevo centro hospitalario, ubicado en el barrio de 'El Terminillo'. Ha hablado de "incertidumbre" en el barrio, de comercios en riesgo y de un edificio que no puede quedarse sin uso, pero la escena ha dado un giro cuando se le ha preguntado qué haría él con esas instalaciones: su respuesta ha sido que no tiene ningún plan.

Lo que pretendía ser un ataque al Gobierno de García-Page ha acabado convirtiéndose en un ejercicio de improvisación que ha dejado en evidencia a quien aspira a presentarse como alternativa. Núñez ha exigido certezas mientras admitía que el PP no dispone de ninguna propuesta. Su única salida ha sido reconocer que quizá en el programa electoral, "cuando llegue el momento", ya se les ocurrirá algo para prometer a los conquenses, lo que equivale a confesar que, a día de hoy, su partido no tiene alternativa alguna para ofrecer a Cuenca.

El líder del PP ha tratado de disimular la falta de ideas apelando a la necesidad de "hablar con los profesionales de la sanidad y las políticas sociales" para definir una hoja de ruta. Una declaración tan genérica como insuficiente, que no ha resuelto la pregunta inicial. Porque la cuestión ha sido sencilla: "¿qué haría el PP con el Virgen de la Luz?" Y la respuesta, desnuda, ha sido que todavía no lo saben.

En contra de crear vivienda en estos terrenos

La incoherencia ha sido aún mayor cuando se le ha planteado la opción de destinar los terrenos a viviendas de protección oficial. Núñez ha descartado esa vía y ha vuelto a repetir la receta de su partido: rebajas fiscales y reactivar suelos que llevan años sin usarse. Fórmulas de manual que nada tienen que ver con el edificio concreto que estaba sobre la mesa.

La comparecencia ha terminado dejando la imagen de un dirigente que exige lo que él mismo no es capaz de dar. Paco Núñez ha querido retratar al Gobierno de Emiliano García-Page como falto de proyecto, pero ha terminado describiéndose a sí mismo.

3.000 pacientes atendidos en el nuevo hospital en menos de un mes

Mientras tanto, lejos de la "incertidumbre" que agita Núñez, la realidad avanza a otro ritmo. El vicepresidente primero del Gobierno regional, José Luis Martínez Guijarro, recordaba este lunes que en apenas un mes ya han pasado más de 3.000 pacientes por el nuevo Hospital Universitario de Cuenca para consultas externas, analíticas o pruebas de imagen en sus primeras salas activas. Solo en estas semanas se han realizado 500 radiografías, 200 resonancias magnéticas y medio centenar de TACs, es decir, cerca de 800 pruebas con la última tecnología disponible.

Guijarro subrayaba que el traslado se está ejecutando según el plan diseñado por el centro coordinador y que cada semana se incorporan nuevas especialidades médicas. A la vez, se está procediendo al cierre escalonado de servicios en el antiguo Virgen de la Luz, como el bloque de Administración, que quedará clausurado a mediados de octubre. Un proceso ordenado y público, frente a la falta de propuestas del PP, que habla de planes mientras el hospital nuevo ya es una realidad para miles de conquenses.