La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha ofrecido esta semana el hospital Enfermera Isabel Zendal a “toda España” para acoger pacientes de otras comunidades en caso de que necesiten ayuda para afrontar esta tercera ola de la pandemia. “Se lo ofrecemos a todos, a toda España, a Castilla y León, Castilla-La Mancha y a todas las comunidades que lo necesiten”, defendió la presidenta en el pleno de la Asamblea de Madrid.
Este ofrecimiento resulta un tanto contradictorio cuando fuentes del Ejecutivo regional aseguran a ElPlural.com que en esta tercera ola se han derivado a la sanidad privada al menos nueve pacientes de UCI y tres pacientes oncológicos. Todo ello a pesar también de que la infraestructura estrella de Ayuso ha tenido que triplicar la capacidad para la atención de los críticos: se ha pasado de los 16 puestos UCI y 32 de UCRI con los que comenzó a funcionar en diciembre a 44 camas UCI y 96 de UCRI.
2.084 euros diarios por cama de UCI en la privada
La Comunidad de Madrid tomó el mando único sanitario en la región el pasado 22 de enero por la tendencia al alza en el aumento de contagios. Esta decisión repercute en la sanidad privada, porque adquieren también su control. Ya había advertido el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, que su Ejecutivo remuneraría por actividad a la privada. Así, 40 centros privados pasan a disposición de la administración con la fijación de unas tarifas por la atención.
Concretamente, el Gobierno madrileño paga por cada paciente que sea tratado por coronavirus 734 euros al día para aquellos que ingresen en planta y 2.084 por día para los que lo hagan en la UCI. Unas cifras muy elevadas teniendo en cuenta que la construcción del hospital Zendal acumula un coste de 150 millones de euros, cifra muy alejada de los 50 millones que inicialmente se presupuestaron.
A la polémica creada por las quejas de los profesionales sanitarios y sindicatos por ser derivados al nuevo hospital, el sobrecoste del centro y el controvertido equipamiento del que está dotado, se suma el cierre de plantas que todavía sigue en centros públicos de la Comunidad de Madrid, como en el Hospital Infanta Sofía, donde se mantienen cerrados 16 puestos de UCI y toda una cuarta torre.
Relajación de medidas
A pesar de las dramáticas cifras de contagios y de fallecidos -40.618 casos nuevos y 592 muertes en hospitales en los últimos 7 días-, el gobierno madrileño ha decidido relajar las medidas en la hostelería. Este viernes ha entrado en vigor la norma que permite aumentar de cuatro a seis las personas que se pueden reunir en terrazas, aunque, eso sí, implantando la obligatoriedad de las mascarillas en bares y restaurantes, medida que lleva en vigor desde el pasado verano.
