Isabel Díaz Ayuso ha mostrado su enfado durante la sesión de control a su Gobierno de este jueves después de que varios diputados de la oposición reprocharan una de sus afirmaciones sobre el número de vacunas caducadas en la Comunidad de Madrid.

La presidenta madrileña respondía a la intervención de la portavoz adjunta de Unidas Podemos, Alejandra Jacinto, en la que había criticado la gestión sanitaria del Gobierno regional y los retrasos en la Atención Primaria, que había explicado la odisea que había tenido que vivir para que su hija fuera atendida en Urgencias, pero que ha estallado cuando iba a hablar sobre los fallecidos por la pandemia.

Ayuso tildaba a Podemos como "el cáncer político" y mostraba su enfado porque cuestionara la gestión de su Gobierno: "Es lo normal, de la sangre y el dolor hacen política, por eso han conseguido menos escaños en las elecciones".

"Nadie les cree nadie. Solo politiza el dolor y no arrima el hombro nunca. Parece que se alegran de lo que pasa. Nunca ayudaron y solo protestaron contra un hospital público que salvaba vidas", ha señalado la dirigente regional.

La presidenta de la Comunidad de Madrid razonaba que desde la Consejería de Sanidad se habían "duplicados los aparatos y los equipos de mamografías", mientras sacaba pecho por haber sido la primera comunidad autónoma en "cerrar los colegios" o diseñar "una vuelta a las clases que fue el mejor".

Tras justificar los pasos que había adoptado su Gobierno, y echar en cara al Ejecutivo de Pedro Sánchez que por su culpa se hayan caducado las 100.000 vacunas: "Ustedes han apostado por una marca y no por otras". Pero, tras ello, ha mostrado su enfado reaccionando, indignada tras las críticas de la oposición: "Sobre las cifras de fallecidos, bueno... de verdad, hasta luego... da igual, paso”.