El presidente andaluz, José Antonio Griñán, ha asegurado hoy que no teme nada de las posibles acusaciones que pueda realizar el exdirector general de Trabajo, Francisco Javier Guerrero, y ha recordado que la Junta solicitó que declarara ante la juez Mercedes Alaya.

"Nadie de la Junta puede decir que se haya hecho algo a sus espaldas"
En una entrevista en la Cadena Ser Griñán se ha referido así al paso de Guerrero por el despacho de la magistrada que instruye el caso de los ERE fraudulentos, declaración en la que ha dicho que "nadie del Gobierno de la Junta puede decir que se haya hecho algo a sus espaldas".

"Somos parte acusadora"
Preguntado por si temía que Guerrero implicase a los exconsejeros de Empleo José Antonio Viera y Antonio Fernández (ya imputado), el presidente ha respondido: "No temo nada. Somos parte acusadora y pedimos su declaración".

"El PP busca que me llegue algún tipo de responsabilidad"

Griñán ha explicado que denunció el caso de los ERE cuando lo conoció y ha vuelto incidir en que, al margen de la instrucción judicial, hay una instrucción "política" por parte del PP que está "buscando la forma de que me llegue algún tipo de responsabilidad".

"El PP persigue una instrucción política"

"Lo que persigue el PP -ha recalcado- es una instrucción política". De otro lado, ha rechazado tajantemente las denuncias reiteradas de los populares sobre el presunto mal uso que la Junta dio a la partida 31L, la misma que Guerrero calificó como "fondo de reptiles".

Utilización correcta de los EREs
"La mayoría de esta partida se utilizó para solucionar problemas laborales de personas que lo necesitaban", ha expuesto Griñán, que ha recordado no obstante que "hay intrusos, ayudas sin procedimiento y alguna ilicitud", situaciones que "hemos denunciado", ha puntualizado.