La secretaria general del PSOE de Andalucía, Susana Díaz, ha hecho un llamamiento a Moreno Bonilla para “cumpla su palabra” y abra de inmediato los centros de salud a la atención médica presencial que prometió para hace más de dos meses, el pasado 2 de marzo, considerando que “si el estado de alarma se acaba para todo y se puede ir a las discotecas, no tiene sentido que la gente no pueda ir a su médico”. “Si no abre los centros de salud es porque no quiere”, ha recalcado.

En declaraciones a los medios de comunicación en Córdoba, Susana Díaz ha subrayado que lo que más preocupa a la ciudadanía andaluza es “no perder el trabajo, no contagiarse y poder vacunarse” y, por este motivo, ha exigido a Moreno Bonilla que “no juegue, no pelee, no enfrente y no utilice más las vacunas para hacer oposición” al Gobierno de España. Ha incidido en que con la campaña de vacunación del Covid-19 “no se puede hacer enfrentamiento político porque genera inseguridad” cuando “las vacunas deben dar confianza”.

En este sentido y en relación al fármaco de AstraZeneca, Díaz ha criticado que Moreno Bonilla “ahora no se puede quejar” de que llegan miles de dosis a la comunidad “cuando ha llegado a tener hasta 300.000 en el congelador sin administrar”. En su opinión, “no hay peor vacuna que no tenerla y, cuantas más dosis lleguen, mejor para Andalucía”, y ha lamentado que el presidente de la Junta “es como el perro del hortelano, que no vacuna lo suficiente y se queja de que lleguen cada vez más dosis”.

La responsable regional socialista ha indicado que “he hecho un planteamiento desde la lealtad” sobre la propuesta estatal de crear peajes sobre el uso de las autovías y se ha mostrado “convencida de que el Gobierno de España lo va a recoger con sensibilidad y esa noticia seguramente se retirará”. Ha recordado que en Andalucía “llevamos muchos años defendiendo que se levantaran peajes como el de Sevilla a Cádiz” y ha defendido que son las grandes fortunas “las que tienen que hacer un esfuerzo” en materia de impuestos, reiterando que “poner nuevos peajes recae sobre los hombros de los trabajadores”.