Una docena de asociaciones de mujeres afectadas por cáncer de mama han remitido una carta al consejero de Salud de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, en la que reclaman soluciones ante la "suspensión" de algunas sesiones de quimioterapia en el servicio de Oncología del hospital Virgen Macarena como consecuencia de las alteraciones que se han producido en el centro ante la crisis sanitaria provocada por el coronavirus.

Lazo Rosa, Banderas Rosas, La Sonrisa de la Vida o la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama de Sevilla son algunas de estas asociaciones. En la carta han recordado que el pasado mes de octubre se reunieron con el entonces gerente del hospital sevillano, Francisco Merino López, recientemente dimitido  alegando "motivos personales" pero coincidiendo con la investigación abierta por la Consejería de Salud y Familias para dilucidar el origen del alto número de contagios por coronavirus que se ha producido entre los sanitarios del centro.

En el escrito se quejan por "estar siendo atendidas en los sótanos del hospital, en unas condiciones deplorables y del todo indignas, donde la masificación que cada día se produce en las consultas implica que los pacientes oncológicos pasen horas de pie, en salas de espera que carecen absolutamente de ventilación natural, en consultas que no disponen ni de lavabos para una correcta higiene de los sanitarios ni de los pacientes y tan pequeñas que carecen de medidas que garanticen la intimidad".

Añaden que la reestructuración que se ha realizado en las plantas del edificio a causa del coronavirus está causando un perjuicio para los pacientes oncológicos y más, en aquellos casos con movilidad reducida: "Los pacientes oncológicos se encuentran distanciados de los servicios sanitarios a los que han de acudir para recibir su atención médica, de manera que la zona de extracciones y la unidad de día, zona de tratamiento, se encuentra en la primera planta y, ahora, durante el Covid-19, en la cuarta planta del edificio principal, lo que supone que al enfermo oncológico una complicación más, sobre todo a los que tienen movilidad reducida, a la hora de desplazarse entre las consultas del sótano y la zona de tratamiento en la cuarta planta, al no existir un ascensor que comunique directamente".

Estas asociaciones también avisan de las citas que se han anulado con motivo del estado de alarma: "Se han anulado citas presenciales no imprescindibles y se están realizando consultas telefónicas en los supuestos que el estado del paciente lo permite. Sin embargo se da la circunstancia de que a pacientes oncológicos les están suspendiendo las citas para recibir tratamiento y por ello, hay enfermos/as que están, literalmente viéndose desfallecer, por carecer del tratamiento adecuado en el momento adecuado".