El Sindicato de Enfermería (Satse) califica lo sucedido en el Hospital Virgen de la Victoria de Málaga de “nuevo y gravísimo error achacable en exclusiva a la Consejería de Salud de Andalucía", un departamento que suma "un cúmulo de equívocos y de imperdonables traspiés que están poniendo en grave peligro la salud de todos".

La central mayoritaria entre los trabajadores de enfermería ha denunciado en una nota de prensa que la Junta se ha visto obligada a retirar “un nuevo modelo de mascarillas defectuosas en el Hospital Virgen de la Victoria que no han superado las pruebas de evaluación del Centro Nacional de Medios de Protección (CNMP)”.

Las mascarillas fueron compradas directamente por el Hospital Virgen de la Victoria y distribuidas hace varias semanas entre los profesionales de este centro. Se trata del sexto lote de mascarillas que retira la Administración regional por no garantizar la protección de los profesionales.

Se trata de mascarillas que el personal del centro “ha venido usando desde el mes de abril en el centro, hecho que evidencia que la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía no está llevando a cabo el necesario y adecuado control de los equipos de protección que está repartiendo entre sus profesionales”.

El Sindicato de Enfermería relata que este modelo mascarilla “no cumple como FFP2, sino como FFP1, motivo por el que se ha ordenado su retirada”. Recalca también que la consejería que dirige Jesús Aguirre "es responsable de este desafortunado incidente, ya que es labor y competencia propia de la Junta de Andalucía revisar que todo el material que se entrega a los profesionales sanitarios para su protección y la de los usuarios cumple todos los estándares de calidad y todos los requisitos específicos que la normativa establece para este tipo de material sanitario".