El Museo de Arte Ibero de Jaén y el Museo Picasso de Málaga se gestaron en paralelo a mediados de los años noventa. Fue en ese mismo periodo cuando ambos proyectos comenzaron a tomar cuerpo. Mientras los malagueños disfrutan de esta infraestructura desde hace catorce años, los jiennenses observan perplejos cómo las obras de este espacio museístico se dilatan en el tiempo. Dos décadas de demora y dos décadas también de enfrentamiento entre la administración local y autonómica a costa de un museo que por unas cosas u otras va camino de convertirse en un culebrón. La última polémica surge tras la petición por parte de la consejera de Cultura, Rosa Aguilar, al Consistorio jiennense para que ceda a la Junta los terrenos del Museo de Arte Íbero. Según Aguilar, el Gobierno municipal del PP "sigue sin ceder el suelo después del tiempo transcurrido", un extremo que señala "imprescindible", porque "para realizar los últimos pagos de la obra, el sistema exige el número del inventario de inmuebles de la Junta. Si no es de la Junta, no podemos terminar el pago ni por tanto la empresa entregará la obra". Aguilar tilda de "muy grave" que "por el incumplimiento del Ayuntamiento Jaén no pueda acceder a la primera línea del mapa museístico español". REPROCHES DEL PP Las declaraciones de la consejera han tenido su réplica con el concejal de Personal y Comunicación, y responsable del área de Patrimonio, Miguel Contreras, que tachó de "desfachatez absoluta que la Junta, después de más de once años de retraso en las obras del Museo Íbero, trate de culpar al Ayuntamiento por la falta de un trámite burocrático que dicen puede haber, ya que esto es más propio del club de la comedia que de la Junta de Andalucía". Para el regidor popular, la Junta "está inhabilitada moralmente para hablar del Museo Íbero". "Es curioso que ahora se acuerden de que han estado invirtiendo en un terreno que no es suyo", dijo al tiempo que se preguntaba "si eso no lo sabían desde hace once años, o tampoco lo sabían cuando en el Ayuntamiento gobernaba el PSOE con IU". No obstante, indicó que "si de verdad hay algún trámite burocrático que haya que hacer, que la Junta de Andalucía no se preocupe porque el Ayuntamiento lo hará con urgencia". El trámite al que alude el edil popular se refiere al convenio de colaboración suscrito el 12 de noviembre 2002 por el cual se producía la cesión de la antigua cárcel a la ciudad para su conversión en Museo de Cultura y Arte ibérico. La rubrica tuvo lugar en la subdelegación de Gobierno de Jaén, y contó con la presencia del subsecretario del Ministerio de Hacienda, Rafael Catalá; la consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, Carmen Calvo; el presidente de la Diputación de Jaén, Felipe López, y el alcalde de Jaén, Miguel Sánchez de Alcázar. El mencionado acuerdo materializó otro suscrito con anterioridad (en enero de 2001), entre el Ministerio de Hacienda, el Consistorio jiennense y la Agencia Estatal de Administración Tributaria para la cesión gratuita de la parcela del edificio y que de  momento no se ha producido. UN PATRIMONIO EXCEPCIONAL La Asociación Amigos de los Íberos, que se creó a la par que se gestaba este proyecto, contempla atónita este nuevo rifirrafe entre Ayuntamiento y Junta. Arturo Ruiz, miembro de la asociación y director del Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibera, manifiesta su malestar "por todo aquello que suponga una nueva obstrucción" en la recta final de las obras de la infraestructura. En este sentido, apunta que "toda administración debe cumplir con los trámites burocráticos que forman parte del acuerdo alcanzado entre administraciones". Ruiz afirma que este tipo de situaciones le "irritan", porque de alguna manera "supone que se pospongan los intereses culturales y económicos de Jaén por intereses partidistas", aunque confía en que se resuelva cuanto antes. Para el arqueólogo jiennense, el museo aporta a la ciudad "una singularidad que es lo ibérico". Así, apunta que fuera de "Madrid, con el arqueológico nacional y las Damas de Elche y Baza", se encuentra Jaén donde se produce "una concentración de conocimientos de unos objetos extraordinarios como son los materiales del patrimonio arqueológico ibérico que se pueden convertir en un reclamo turístico y en un espacio cultural único en Europa. Todo este material, concluye, justifica por sí solo la existencia de museo internacional de arte íbero". "El hecho de que las esculturas de El Pajarillo de Huelma, las de Cerrillo Blanco de Porcuna o el yacimiento de Puente Tablas se asocien a Jaén es indicativo de una riqueza extraordinaria que existe en esta provincia", añade Arturo Ruiz, que recuerda las implicaciones de universidades y grupos de investigación de fuera de la provincia que han trabajado "en el conocimiento para que estas piezas lleguen al ciudadano en las mejores condiciones posibles". Para el director del Instituto Universitario de Investigación en Arqueología Ibera, el museo aportará "un nivel cultural alto", debido a la "calidad excepcional de las piezas que albergará este nuevo espacio cultural".