El portavoz del grupo socialista en el Parlamento, Mario Jiménez, ha acusado este lunes al presidente del PP-A, Javier Arenas, que ha expresado públicamente su convencimiento de que las elecciones autonómicas serán el 25 de marzo, de pretender "usurpar" el papel y la potestad del presidente de la Junta, José Antonio Griñán, de decidir sobre la fecha de los comicios andaluces.

"Ansias enfermizas"
En rueda de prensa, Mario Jiménez ha expresado que las "ansias enfermizas" de Arenas por "ocupar en el imaginario de los ciudadanos un papel que no le corresponde como presidente de la Junta, lo que le han negado los ciudadanos una y otra vez, le lleva incluso a pretender usurpar un papel que corresponde exclusivamente al presidente".

Potestad del Presidente
Jiménez ha querido dejar claro, tras ser preguntado sobre la fecha de las elecciones, que esa es una potestad que corresponde al jefe del Ejecutivo, que decidirá "en función del interés general de los andaluces".Asimismo, ha expresado, tras las manifestaciones de Arenas, que todo el mundo debería de ser "muy respetuoso" con esa potestad del presidente de la Junta.

"Idilio"
De otro lado, Mario Jiménez ha insistido en criticar el "idilio" que, a su juicio, están viviendo PP-A e IULV-CA, que se han convertido en una "pareja de hecho". "Se levantan juntos, comen juntos y no se si dormirán juntos", según ha expresado el dirigente socialista, en referencia al hecho de que haya coincidencia entre las posiciones de ambas formaciones en debates que se están desarrollando en el Parlamento, como el relativo al proyecto de Ley que regula el Impuesto sobre el Patrimonio.

El cálculo de Izquierda Unida
Preguntado sobre los motivos que IULV-CA puede tener para mantener esa posición, Jiménez ha estimado que el cálculo que tiene Izquierda Unida pasa por que entiende que es más favorable para su posición política "el debilitamiento de las opciones de la socialdemocracia que representa el PSOE".

No es descartable que "juegue  la carta de la derecha"
Se ha mostrado convencido de que el escenario que está en la mente de Izquierda Unida es que si el PSOE-A no lograra la mayoría absoluta en las próximas elecciones autonómicas, no es descartable que "juegue la carta de la derecha" en Andalucía, como ha ocurrido en Extremadura.