Ya tenemos ganador de la segunda tarjeta de regalo de FNAC, valorada en 60 euros. En esta ocasión, el ganador es José Martínez, que comparte con nosotros el duro relato de cómo ha vivido esta última década, marcada en gran parte por la crisis económica, que ha vivido en primera persona:
Hace diez años tenía los dos patitos, que se suele decir, 22 años. Justo ese año dejaba el trabajo, mi primer trabajo que duró tan solo tres. Lo dejé porque la empresa llevaba año, año y medio, de suspensión de pagos y comenzaban a reducir personal de forma exagerada. También ese año me enamoré de la que sería mi primera pareja y apoyo a lo largo de cinco años. Junto a ella me mudé, a pesar de que los trabajos que conseguía eran ya temporales (1 mes, 3 meses...), con grandes sequías sin cobrar nada. Incluso llegué a hacerme autónomo, lo que resultó un tirar dinero constante gracias a las políticas de nuestro país, solo hubo un mes de los tres años que estuve que me resultó rentable, es decir gané más dinero de lo que pagué al Estado. Esa temporada fue un desazón en la que se me fueron todos los ahorros. Pero creo que fue mi vena artística lo que me mantuvo en cordura y con motivación para vivir, participé en concursos, gané alguno al principio pero con el tiempo es algo que ya por edad o por lo que sea dejó de suceder... Pero no importaba, me gustaba expresarme artísticamente, hoy en día con lo difícil que está todo, hasta esto me supone un suplicio.

Con la separación y sin trabajo, poco duré independizado volviendo a una habitación que apenas alcanza el metro cuadrado más el espacio para la cama. Así es la vida de un adulto en el siglo XXI.

He tenido suerte y he podido realizar algún viaje en esta década, siempre low cost; pero a día de hoy llevo cuatro años sin trabajo (del último que fue de tres meses), sin un sueldo. He levantado proyectos personales que se sustentan un tiempo corto, pero sin recursos, ni dinero, ni infraestructura poco importa que seas el primero que descubriste a ciertas personas, hoy populares, poco importa que tú arriesgases mientras otros supieron que vivir cómodamente no es crear sino robar.

Estos diez últimos años pertenecen a mi época de crecimiento, la que me definirá en el futuro (de 22 a 32 años) y ha sido un tobogán, por cada mes, año que pasaba mi futuro estaba cada vez más oscuro y sin fin, como si cayendo por el tubo cuesta abajo y no pudiese ver el suelo donde todo se parase...

Si se me permitiese regresar a los 22 años, huiría, huiría a otro país, uno en el que por ser autónomo no me desangren, uno en el que se valora el esfuerzo y no que seas el primo del jefe, pero tal vez me pase lo que ya sucedió en su día. Salir nada preparado de los estudios reglados obligatorios de un país que se preocupan más por lo que haces en un día en un examen (en el que puedes copiar, cosa que yo no hice) que no el progreso de todo un curso escolar, y claro, que apenas sepa decir mi nombre en inglés no te da suficiente valor para salir al extranjero.

Mis últimos diez años son el puñetero bache que los ahora famosos actores siempre dicen, fueron unos años muy malos pero con esfuerzo he llegado a donde ahora estoy. En mi caso creo que eso nunca sucederá, porque no soy actor, y apenas salgo de mi habitación desde hace ya dos-tres años mientras mi cuenta sigue creciendo en números negativos.

Si hasta temo que el día que vaya a trabajar, si sucede algún día, tenga un ataque de estrés o depresión post-paro y no sepa relacionarme más allá que con mi gatita.

Además, queremos agradecer el interés a todos los que habéis participado y recordaros que ya estamos recibiendo las candidatas para el concurso de la semana que viene. Si quieres participar, envíanos tu carta. La mejor, más original o emotiva será premiada con un cheque de 60 euros de FNAC.

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