33 meses después, unas cuantas cartas enviadas a periodistas como Marhuenda o a la mismísima Esperanza Aguirre pidiendo que contaran la verdad y le exculpasen y tras mil y un ruegos al juez para que le dejase en libertad; Francisco Granados ha salido de la cárcel de Estremera.

El exconsejero madrileño, mano derecha de Aguirre y alcalde de Valdemoro, uno de los epicentros de la Púnica, ha abandonado su celda tras conseguir reunir la fianza de 400.000 euros que le pedía el juez Velasco, el instructor del caso.

Ha su salida, bajo un sol de justicia, se ha encargado de ir soltando algo más que píldoras que dejan intuir que jugará a demostrar su inocencia y a pedir explicaciones. Por eso, no ha dudado en decir que pedirá "responsabilidades" a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, a la fiscalía y a todos aquellos que han firmado informes contra su persona acusándole de ser el cabecilla de la trama Púnica.

Y es que, aunque Granados está acusado por los delitos de blanqueo de capitales, pertenencia a organización criminal, tráfico de influencias, cohecho, malversación, prevaricación y fraude, ha asegurado que no sabe si hay o no trama Púnica, “pero desde luego yo no soy el cabecilla”.

Es más, ha mantenido que podrá ir "desmontando uno por uno" los informes de la UCO por estar llenos de "falsedad e inconcreción" y de palabras con "mala idea". "Iré demostrando su falsedad y su inconcreción uno por uno. Como es lógico también pediré responsabilidades a los funcionarios que los hayan firmado, sean de la UCO, sean de la Fiscalía o sean de quien sean", ha sentenciado.

"Yo tengo acreditado mi amor y mi respeto por la Guardia Civil desde hace muchísimos años, pero eso es una cosa y otra cosa son personas concretas con nombres y apellidos que, como digo, han elaborado informes".

Con ganas de hablar

Granados ha dejado el centro penitenciario “con ganas de hablar” aunque parece que, en principio, no seguirá los pasos del otro líder de la trama, el constructor David Marjaliza. Este consiguió salir de la cárcel tras ofrecerse a la justicia, ayudar con informaciones y tirar de todas las mantas que estaban a su alcance.

Sin embargo, Granados ha asegurado que no tirará de la manta” porque “no hay ninguna manta de la que tirar". "Jamás he visto ninguna irregularidad en las cuentas del PP".

Periodistas acampados esperando la salida de prisión de Francisco Granados. EFE

A mediodía de este miércoles se supo que era inminente la salida de Granados de la prisión de Estremera. Aun así, se ha hecho esperar y se ha retrasado un par de horas, tanto que el popular ha usado sus primeras palabras para pedir perdón a los periodistas que le esperaban.

Granados ha querido despedirse de sus “compañeros” del módulo 3 y dar las gracias por el trato recibido por los funcionarios.