La llamada Ley de Transitoriedad Jurídica que la Generalitat prepara como hoja de ruta para la independencia establece detalles como los requisitos para conseguir en ese supuesto la nacionalidad catalana.

Según el borrador del Govern, que adelanta este lunes El País, podrán obtener de forma automática el pasaporte catalán aquellas personas con ciudadanía española que acumulen al menos un año de empadronamiento en un municipio catalán o aquellos que, ostentando la misma nacionalidad, puedan acreditar dos años continuados de domicilio en Cataluña.

Al menos, de acuerdo con lo que ha trascendido hasta ahora por parte de responsables políticos de Junts pel Sí, asumir la nacionalidad catalana “no exige” la renuncia de la española. Sin embargo, el texto precisa que el Gobierno de la república catalana promoverá “negociaciones con el Estado español para celebrar un tratado en materia de nacionalidad”.

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Podrán tener también el pasaporte catalán quienes hayan nacido en Cataluña, quienes hayan residido fuera, pero hayan vivido en la comunidad durante un mínimo de cinco años o aquellos que sean descendientes de catalanes.

El borrador de la Generalitat también establece que se podrá adquirir la supuesta ciudadanía catalana a través de un matrimonio con un catalán o una catalana.

Como ocurre con la Ley española, los ciudadanos de países iberoamericanos, Andorra, Portugal, Filipinas y Guinea Ecuatorial también podrían optar a hacerse catalanes.