Ni un solo voto en contra. Los resabios de la derecha ante la igualdad de derechos de las personas independientemente de sus inclinaciones sexuales parecen cosa del pasado. Al menos sobre el papel y al menos ante la futura ley autonómica para garantizar los derechos, la igualdad de trato y no discriminación de las personas Lgtbi y sus familiares.

El Pleno de la Cámara andaluza aprobaba este miércoles por unanimidad la toma en consideración de dicha proposición de ley presentada por PSOE, Podemos e IULV-CA, cuyo trámite parlamentario se iniciaba así con los mejores augurios.

La protección de los derechos Lgtbi ya está regulada parcialmente en Andalucía a través de la Ley 2/2014 para la no discriminación por motivos de identidad de género y reconocimiento de las personas transexuales de Andalucía.

El papel de Oña

Por parte del PP intervenía la diputada Esperanza Oña, que ya se significó en el pasado defendiendo posiciones muy abiertas durante el debate parlamentario de la Ley 2/2014 y venciendo las reticencias de la formación conservadora.

Oña apeló ayer a la necesidad de "ser personas libres de todo tipo de prejuicios" y más justas con un colectivo que "ha sufrido mucho en las distintas épocas de la historia". Mientras, Marta Bosquet, de Ciudadanos, confió en poder introducir enmiendas que sirvan para "enriquecer" el texto favoreciendo.

Una ley tardía

Por el PSOE defendió la iniciativa Soledad Pérez, que puso en valor el paso pionero que dio España bajo el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero al convertirse en "el primer Estado del mundo en reconocer el matrimonio entre personas del mismo sexo".

Para el diputado de Podemos Jesús Romero esta ley "llega muy tarde", debido a la "larga sombra del nacionalcatolicismo", mientras que para la diputada de IULV-CA Inmaculada Nieto se había puesto fin a "una tramitación disparatada que no deberíamos permitir que se repitiera".

Acuerdo público

Inicialmente, los tres grupos de la izquierda tenían sus propias propuestas independientes, pero esta vez, al contrario que tantas otras, sí lograron unificarlas y plasmar en un texto y a la vista de todo el mundo una coincidencia que en el pasado apenas conseguía franquear el ámbito privado.

Además de crear un Consejo Andaluz de Participación del colectivo Lgtbi para evaluar el desarrollo de las políticas en esta materia, la ley prevé que los centros residenciales, los de día para personas mayores, los de participación activa y los destinados a personas con discapacidad garanticenn el derecho a la no discriminación de las personas tanto a título individual como en su relación sentimental.

Derechos sanitarios

En materia sanitaria, la proposición incorpora los derechos de los menores transexuales ya recogidos en el Proceso Asistencial Integrado que la Consejería de Salud desarrolla desde enero de este año. Se incluyen entre ellos el tratamiento de bloqueo hormonal al inicio de la pubertad, para evitar el desarrollo de caracteres sexuales secundarios no deseados, y el tratamiento hormonal cruzado en el momento adecuado para propiciar el desarrollo de los deseados. Sobre los menores intersexuales, el sistema sanitario público de Andalucía velará para que las prácticas de modificación genital en recién nacidos no atiendan únicamente a criterios quirúrgicos.

Sanciones

En materia educativa, se refuerzan las medidas de prevención y lucha contra el acoso escolar por motivos de orientación o diversidad sexual y se incorporan criterios de igualdad de oportunidades en las convocatorias de ayudas y subvenciones de fomento del empleo.

La propuesta también incluye un régimen de infracciones y sancionador, con multas de hasta 120.000 euros, para prevenir y erradicar cualquier forma de discriminación y proteger y reparar a las víctimas.