El exministro de Industria, José Manuel Soria, afirmó en el Congreso de los Diputados el 13 de junio de 2012 que el Gobierno de Mariano Rajoy, llegado pocos meses antes a la Moncloa, continuaría “literalmente" con el plan de cierre de las cuencas mineras que fue "elaborado por el anterior Gobierno" de José Luis Rodríguez Zapatero y remitido a Bruselas en agosto de 2011.

Gracias a un documento de la Comisión Europea (CE), se ha podido conocer que esas declaraciones en sede parlamentaria fueron la enésima mentira que el exministro lanzó a todos los españoles, ya que fue el Ejecutivo de Mariano Rajoy quien solicitó formalmente a Bruselas la puesta en marcha de una ayuda para financiar el cierre de las productoras de carbón.
 

El PP dio el hachazo final

Fue apenas dos meses después de la investidura de Mariano Rajoy, el 7 de febrero de 2012, cuando el Gobierno del PP hizo esta solicitud, según señala el documento de la Comisión Europea al que ha tenido acceso leonoticias.com, y no el del PSOE de Zapatero, iniciando los trámites para proceder al cierre de las minas de interior.

El plan para el final de la extracción de carbón en España incluía 15 empresas mineras, cuatro de las cuales ya han cerrado todas sus unidades de producción, dos han cesado la producción y sólo nueve siguen produciendo hasta, por lo menos, 2018.

El importe total de las ayudas europeas para el cierre fue de 2.128,5 millones de euros para cubrir las pérdidas de producción y los costes excepcionales en virtud del Plan de Cierre 2011-2021. Además, se incluyeron 1.454 millones de euros para que las productoras de carbón cubriesen los costes excepcionales del cierre, como prestaciones sociales, pensiones e indemnizaciones, daños en las minas o rehabilitación de zonas.

En cuanto al número de trabajadores que se verían afectados, el plan remitido por el Gobierno de Mariano Rajoy a Bruselas contemplaba que serían cerca de tres mil los que se podrían beneficiar de las indemnizaciones por prejubilación hasta 2018, estando obligadas las empresas a comunicar los afectados cada año.