Una vez más los datos son tozudos y nos devuelven a una realidad dura, especialmente para a quienes llevan sufriendo desde hace unos años esta crisis económica. La clase media es la que más la ha padecido, hasta el punto de que nuestro país es el que presenta un incremento de pobreza y una brecha entre 'ricos y pobres', mayores.

La tozudez de esos datos golpea fundamentalmente al Gobierno de la nación. Mariano Rajoy, junto con los ministros encargados de las tareas relacionadas de forma directa o indirecta con la economía (Hacienda, Economía y Empleo), han utilizado el mantra de la recuperación para extraer rédito político en las pasadas elecciones del 26J.

El desempleo sigue descendiendo en una proporción sospechosamente parecida a como también lo hace la población o el incremento del número de españoles que se ven en la obligación de emigrar a otros países. Son datos innegables, como los relativos a los recortes sociales y laborales, entre los que hay que incluir las prestaciones por desempleo.

Según denuncia este sábado UGT, las personas beneficiarias de las prestaciones por desempleo “han caído un 32% desde 2010”. La cifra la hace pública el sindicato para instar y “exigir” al Ejecutivo que “los Presupuestos Generales del Estado para 2017 aseguren la cobertura de las personas en situación” de paro.

En este sentido, recuerda a través de un comunicado que, mientras se ha producido ese descenso de más del 30 por ciento, el número de parados “se ha mantenido prácticamente invariable”. A su juicio, esto desmonta otro de los peregrinos argumentos de los que se ha venido sirviendo el Gobierno de Rajoy, es decir, que la bajada “en el volumen de personas protegidas no viene originado por la caída del desempleo, sino por el desmantelamiento del sistema de protección”.

El dato de UGT está ratificado además por la EPA. Ésta establece que el conjunto de prestaciones sólo da cobertura al 44% de los desempleados, “dejando a 2,7 millones de personas fuera del sistema de protección”.

Sin duda alguna, todo esto tiene que ver con las políticas de austeridad puestas en marcha durante la legislatura 2011-2015 por Mariano Rajoy y su equipo y que se han traducido en el destrozo de los pilares del Estado del Bienestar, incluido, como subraya UGT, “el desmantelamiento de la protección por desempleo”.

En términos reales, mientras en el último año de mandato de José Luis Rodríguez Zapatero la cobertura llegaba a un máximo del 78,4%, en apenas unos años se ha caído al 52,9%.