Las nuevas tecnologías al servicio de las personas. Así debería ser y, en la mayoría o en muchas de las ocasiones, así es. Un nuevo ejemplo de esto se encuentra en la aplicación para dispositivos móviles que ha desarrollado la NASA, aunque para ser correctos en el lenguaje habría que decir que de ella se van a beneficiar, sobre todo, las aerolíneas, si bien de rebote también los viajeros.

A grandes rasgos la app creada por la agencia estadounidense busca el ahorro de combustible por parte de los aviones ¿Y cómo lo hace? Ayudando a los pilotos a recalcular trayectos sobre la marcha.

TAP, la app de la NASA
Evidentemente el sistema es mucho más complejo, porque así contado tendría un funcionamiento muy similar a cualquier GPS que utilizamos para desplazarnos en coche o caminando. Sin embargo, esta herramienta va más allá.

TAP (Traffic Aware Planner), que es como se denomina la aplicación, se ha desarrollado y está optimizada para su uso en tablets. La app captura información del avión (altitud, localización, ruta prevista y consumo de combustible) para, a partir de ella, elaborar y preparar una serie de trayectos alternativos a través de los cuales propone un ahorro de carburante (y tiempo) importante.

Meteorología
Para ello, la propia aplicación se sirve del sistema ADS-B (Automatic Dependent Surveillance-Broadcast), que posibilita determinar el posicionamiento del avión, su ruta y que no interfiera en el de otras aeronaves. Para completar el elenco de datos de los que se sirve, TAP también analiza los relativos a la meteorología, así como a la fuerza y dirección del viento.

Primeras pruebas
Tal y como ha informado la NASA, la aplicación ha pasado ya su primer examen a bordo de un avión que cubrió la ruta Virginia-Kentucky. El piloto del mismo se sirvió de TAP para modificar el trayecto preestablecido. El resultado fue de un ahorro de cuatro minutos sobre la duración total prevista para ese vuelo.

A priori no es una gran cifra. No obstante, a pesar de ser solo unos minutos, a las compañías parece que les gusta por los cálculos que hacen de ahorro de costes. Según ha indicado la agencia norteamericana desarolladora del software, está previsto que dentro de tres años sean dos las compañías que empiecen a utilizar este sistema, Virgin America y Alaska Airlanes.