Y es que en efecto, hay que recordar que fue precisamente un escrito de las autoridades judiciales suizas, a raíz de los movimientos de cuentas de Francisco Granados en los bancos de aquel país, los que llevaron a la creación de la causa por la Púnica.
Como dice en el auto en el que prolonga el secreto sobre esta parte del sumario, que por lo demás como se sabe ya se levantó, es que "los hechos denunciados, tipificados inicialmente por las autoridades suizas como delitos de blanqueo grave, han obligado a este Juzgado a abrir nuevas vías de investigación que en este momento necesitan la protección del secreto para apoyar la acción de la Justicia".
La prolongación del secreto sobre los movimientos de capitales de Granados y otros en el extranjero se realiza por el periodo de un mes.