Las imputaciones "tecnicas" a los expresidentes de Andalucía está inmersas de una complejidad legal que es necesario aclarar. En todo caso han supuesto un golpefuerte en la campaña electoral de los socialistas que la oposición se está encargando de explotar en muchos casos con falsedades. Para que esa malinterpretación de los hechos no continúe ha hablado hoy la máxima autoridad de la justicia española, el presidente del Tribunal Supremo presidente del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes, ni más ni menos.

Mero trámite obligado
Lesmes ha manifestado hoy que las imputaciones de Manuel Chaves y José Antonio Griñán, “son un mero trámite que resultaba necesario y obligatorio atendidas las circunstancias”. Lesmes ha indicado que a día de hoy la imputación por los casos de los ERE de la Junta de Andalucía “no significan nada”.

"No significa nada a día de hoy"
El también presidente del Consejo General del Poder Judicial ha incidido en que la decisión del instructor del Supremo, Alberto Jorge Barreiro, de recibirles declaración responde a la “exposición razonada enviada por la juez”. En este caso, ha recalcado Lesmes, “no pueden ir a declarar en otra condición que no sea la de imputado, por lo tanto no significa a día de hoy todavía nada”. Habrá que esperar, ha indicado, a que una vez que se tomen las declaraciones, previstas para los días 7 y 21 de abril, el instructor tome una decisión.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha dicho que cumplirá su palabra si se les imputa delito a los ex presidentes de la Junta. EFE



Pedro Sánchez "cumplirá su palabra"
A este asunto también se ha referido el Secretario General del PSOE, Pedro Sánchez. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha garantizado que si Chaves y Griñán son finalmente imputados por algún delito en la causa de los ERE cumplirá “su palabra” y se les pedirá que abandonen sus escaños. “Desde luego voy a cumplir con mi palabra cuando se produzca esa imputación con delito, si es que se produce.

Seguirán con sus actas
El PSOE permitirá a los expresidentes andaluces Manuel Chaves y José Antonio Griñán mantener sus escaños en el Congreso y en el Senado, respectivamente, mientras el juez del Tribunal Supremo que investiga el caso de los ERE no les impute un delito.