No se trata de un sketch de La hora de José Mota, aunque guardan cierto paralelismo por aquello de que el humorista también es manchego. El caso es que el Ayuntamiento de Ciudad Real, gobernado por la polémica Rosa Romero, alcaldesa que compatibiliza su cargo con un escaño también en la Carrera de San Jerónimo, ha decido, cuatro días antes de la celebración de la huelga general del 29 de marzo, descontar de la nómina de los 800 empleados públicos la parte proporcional que conlleva secundar el paro convocado por los sindicatos.

La bola de cristal
La alcaldesa y su equipo de gobierno hacen gala de una capacidad de premonición, qué más quisiera para sí La Bruja Lola. Los sindicatos se preguntan, ¿cómo es posible descontar de las nóminas el día de la huelga si todavía no saben quién irá y quién no? “O la alcaldesa tiene una bola de cristal, o sabe que la huelga va a ser un rotundo éxito, o esto huele a chamusquina”, reconocen a ELPLURAL.COM fuentes sindicales.

“Medida coercitiva”
En este sentido, el representante de CC OO en Ciudad Real, Manuel Morales, reconocía a este periódico que la decisión del Ayuntamiento obedece a una “medida coercitiva que busca disuadir a los empleados públicos para que no secunden la huelga del 29 de marzo”, añade, “es inexplicable que se descuente de la nómina el día de la huelga sin saber si el trabajador va a ir o no; lo normal es que sea al mes siguiente cuando se realice esta deducción”.

Coacciona que algo queda
En parecidos términos se expresa Juan Jiménez, de UGT, que no duda en catalogar de “coacción” la decisión municipal. “Cuando hay una huelga a final de mes, y como las nóminas se cierran cinco o siete días antes, lo suyo es que se descuente ese día en la retribución del mes siguiente”, dice, para seguidamente apostillar: “Con esto buscan que los trabajadores vean la diferencia del salario para que así no vayan a la huelga”.

Policía local
No solo eso, el representante de USO, Juan Francisco Gascón, puso en conocimiento de la concejala de Recursos Humanos lo que considera una medida ilegal, advirtiéndole que la decisión de descontar de la nómina el día de la huelga también afectaba a la policía local, “cuando de todo es sabido que este colectivo no puede hacer huelga ese día”, aún es más, “el descuento también se ha hecho a los trabajadores del fin de semana, cuando está claro que no trabajarán el jueves, 29 de marzo”.

Cosas de la informática
Gascón reconocía a ELPLURAL.COM que la respuesta de la concejala les causó sorpresa, al “decirnos que el programa informático del Ayuntamiento no sabe distinguir entre un policía local y cualquier otro trabajador municipal”. Pero esto no es la primera vez que ocurre, “ya nos pasó lo mismo en la huelga de septiembre de 2010”.

El Ayuntamiento niega la mayor
Por su parte, la mencionada concejala de Recursos Humanos, Fátima de la Flor, negaba la mayor y decía que no se “ha descontado de la nómina el día 29 de marzo. Lo que ocurre es que con motivo de la huelga general, y puesto que los trabajadores no están obligados a comunicar quien va a secundarla hemos optado por realizar dos nóminas”. Una con el descuento y otra no, y eso que buscan el ahorro y la efectividad.

Enfado sindical
Lo que está claro es que el Ayuntamiento que preside Rosa Romero no tiene contentos a los sindicatos, que recientemente han criticado que la alcaldesa pasará a ser personal laboral del consistorio al asumir éste las competencias y el funcionamiento del Centro de la Mujer, dependiente antes de la Junta de Comunidades y de la Diputación. Además de la regidora, que trabajaba en el citado centro, “pasan por la puerta de atrás, sin concurso, sin oposiciones”, dicen los sindicatos, otras cinco trabajadoras, entre las que encuentra también la concejala del PP, Amparo Messía.