Momento emotivo el vivido este jueves en el plató de 'Ya es mediodía'. Sonsoles Ónega no lo ha podido evitar y ha empezado a llorar durante la entrevista en directo que ha tenido con su padre, Fernando Ónega, que ha ejercido de maestro de ceremonias en el homenaje a las víctimas del Covid celebrado en el Palacio Real. El periodista, que ha participado en el magacín de Telecinco tras finalizar el acto, ha hecho un recuerdo de su hermano, tío de la presentadora, fallecido por el virus.
"Lo que se ha intentado ha sido demostrar que no nos olvidamos de lo que ha hecho el personal sanitario por este país", decía el mítico periodista. "Les hemos dado homenajes privados, los hemos aplaudido desde los balcones y las ventanas, pero faltaba justamente un homenaje de Estado. El personal sanitario perdió a más de un centenar de sus activos y 130.000 profesionales han sido contagiados por este maldito virus", valoraba el comunicador, que explicaba que se trata de "un ejercicio de memoria" para decirles "gracias por estar ahí".
Ónega le preguntaba a su padre por la imagen que nunca olvidará de este último año y medio. "La imagen que yo tengo de este año es justo la que no he visto, la que no han visto cerca de 100.000 familias españolas. Esa de un familiar que un día ingresa en un hospital y no lo vuelves a ver, y lo entierras o lo incineras y no le has podido decir adiós", respondía él sin tapujos: "Yo estoy hablando de mi hermano José Ramón, de tú tío José Ramón".
En ese momento, Sonsoles no podía reprimir las lágrimas y durante varios segundos se ha quedado en silencio, hasta que Rodolfo Irago, que colaboraba en el programa, ha tomado la palabra y ha continuado la conversación con Ónega. Así, ha continuado preguntándole por la excepcionalidad que había supuesto el acto, presidido por los reyes, al unir a la plana política completa del país.
"Te digo una cosa muy amarga: esta mañana escuché que si no llevábamos ya demasiados homenajes. Me pregunto cómo podemos decir eso, con la cantidad de víctimas que hubo, con lo que se han sacrificado y han trabajado", decía. "Todo lo que sea rendirles homenaje, cada año y cada día, se lo merecen".
Al cabo de un rato, y después de que Cristina Cifuentes echara una mano con la entrevista, la presentadora volvía al plano justo para despedir la conexión: "Se tiene que ir. Yo lo dejaría todo el rato con vosotros", decía.