La Corporación Radio y Televisión de Galicia (CRTVG) continúa en el ojo del huracán tras semanas de huelga y paros intermitentes. Los trabajadores, respaldados por representantes políticos como el BNG y el PSdeG, acusan a la dirección de manipulación informativa y de colocar los medios públicos al servicio del partido gobernante. La movilización del personal ha dado lugar a un clima de tensión que, a su vez, ha potenciado una movilización ciudadana en defensa de un medio de comunicación público e independiente.

La presidenta del Comité de Huelga, Raquel Lema, ha señalado en ElPlural.com que desde hace años la CRTVG está bajo un control político sistemático: "Es Venezuela, es Sánchez, es ETA, es de un nivel… esto es demasiado burdo", comentó. Las protestas han ganado fuerza, especialmente tras el anuncio de una manifestación el próximo 1 de diciembre, la cual tiene como objetivo exigir un cambio en la gestión de los medios públicos gallegos, así como la destitución de aquellos que han permitido, según el Comité Intercentros, una deriva partidista en los contenidos informativos.

Contra el anteproyecto de ley de la Xunta

En paralelo a las huelgas, el Comité Intercentros lleva meses oponiéndose como contrapeso al controvertido anteproyecto de ley de la Xunta de Galicia. Según el Comité, su aprobación reforzaría el control político al facilitar la designación directa de cargos estratégicos y permitir una externalización más intensa de la producción.

"Se hace insostenible trabajar en redacciones. […] Todo lo que parece entertenimiento también tiene carga política", enfatizó Raquel Lema sobre el reemplazo de programas emblemáticos por otros producidos externamente. O Termómetro, el espacio que ha sustituido al histórico A Revista, ha sido, para Lema y el Comité de Huelga, la representación máxima del deterioro "del servicio público": "Estamos pidiendo primero que no se externalice el trabajo, que es de los servicios informativos, porque eso es malo, eso incrementa, profundiza la manipulación informativa".

Según el comité, la decisión de externalizar programas debilita los medios públicos y, además, la periodista remarca la importancia de legislar para que la manipulación no sea una opción: "Algún día llegará a estar tipificada la manipulación informativa, ¡debería estar tipificada!, porque son derechos protegidos constitucionalmente, el derecho y la libertad de información".

Convocatoria de una gran manifestación y apoyo político

La manifestación del 1 de diciembre contará con la participación activa de diferentes colectivos sociales y representantes del BNG y PSdeG, quienes han mostrado su respaldo a las reivindicaciones del Comité. En una reciente jornada de huelga, el diputado Iago Suárez del BNG compareció para "expresar el compromiso de su partido con estas demandas, que consideran deben ser apoyadas por toda la ciudadanía gallega".

El Comité Intercentros también ha hecho un llamado directo a la ciudadanía y a los medios de comunicación para romper el silencio mediático. "Lo que se está haciendo con los medios públicos es un delito", sostiene Raquel Lema, al denunciar que tanto la CRTVG como otros medios privados han evitado informar sobre la huelga y las acciones de protesta del personal.

Próximos pasos en la lucha por una CRTVG independiente

Los convocantes de la huelga y la manifestación insisten en la necesidad de establecer un compromiso social y político con el servicio público de radiotelevisión. Los trabajadores y sus representantes han expresado que continuarán con las movilizaciones hasta que se garantice la independencia y pluralidad de la CRTVG. Raquel Lema concluyó: "Estamos haciendo un esfuerzo para romper ese cerco mediático, para que a través de esta huelga, podamos protestar más alto y llegar a más gente".