Las campanadas de 2025, presentadas en RTVE por David Broncano y la humorista Lalachus, estuvieron marcadas por una polémica que superó la habitual competencia por las audiencias, cuando Lalachus exhibió una estampita de la vaca del Grand Prix y el Sagrado Corazón de Jesús. La presentadora explicó "lo importante que es la televisión pública, porque estamos hechos de cachitos de tele", algo que ha provocado un tenso debate en redes sociales, entre los que lo consideran un simple acto de humor y los que lo califican como una ofensa a la religión.
Lo que podría interpretarse como una reflexión humorística y nostálgica sobre la televisión española rápidamente desató una tormenta en redes sociales.
Entre las voces más críticas destaca la del cantante José Manuel Soto, quien en su cuenta de X escribió: "No sé quién es esta señora, pero aprovechar el momento de más audiencia del año en una tele pública para insultar a Cristo y a todos los católicos da una idea de la podredumbre moral de quienes manejan lo público en España".
No sé quién es esta señora, pero aprovechar el momento de más audiencia del año en una tele pública para insultar a Cristo y a todos los católicos da una idea de la podredumbre moral de quienes manejan lo público en España. pic.twitter.com/YyWiVkll2G
— Jose Manuel Soto (@JOSEMANUELSOTO1) January 1, 2025
Pero además de estas figuras conocidas, han sido muchos usuarios los que han criticado a la humorista señalando este gesto como “ofensa a los católicos” y otros simplemente como “blasfemia".
Por su parte, organizaciones como Hazte Oír han anunciado en sus redes sociales que tomarán acciones legales contra los responsables de la emisión, lo que incluye a los dos presentadores y al presidente de RTVE, acusándolos de un "delito contra los sentimientos religiosos".
El Gobierno reafirma su compromiso con la libertad de expresión
La derecha y la ultraderecha criticaron ferozmente a los presentadores de RTVE en las redes sociales desde su anuncio para las campanadas, algo que se intensificó tras el polémico gesto de la estampita realizado por la humorista.
Además, la asociación Abogados Cristianos generó revuelo contra Lalachus, acusándola de ofender a los católicos e iniciando el año con una campaña en su contra.
En respuesta, el Gobierno, con Félix Bolaños al frente, respaldó a la humorista y reafirmó su compromiso con la reforma del Código Penal para eliminar el delito de ofensas religiosas, buscando proteger la libertad de expresión y la creación.
